¿Cómo cree que será el mundo que nos espera a la salida de la crisis?
Esperemos que nos encuentre más reflexivos. Comprender los grandes niveles de desigualdad socio- económica de la región latinoamericana y como este flagelo ha afectado a su población es fundamental, más en este momento donde se observa como la pandemia repercute en los barrios más pobres de la ciudad y de la provincia de Buenos Aires.
Reflexivos en como al aislamiento preventivo y obligatorio no nos encontró a todos del mismo modo, si no que se dispararon las cifras donde no estaban garantizados el acceso a la salud, a una vivienda digna, a un trabajo formal, etc. Reflexivos en cuanto a las decisiones que han tomado los líderes de la región y como éstas han repercutido en la evolución de la crisis epidemiológica que nos afecta. Reflexivos y conscientes sobre la brecha virtual y digital que nos aqueja, en cuanto a la falta de recursos que ha quedado más que evidenciada para poder abordar las exigencias educativas que estamos a travesando los docentes y los alumnos en todos los niveles.
¿Cuáles serán los nuevos rumbos o decisiones que deberemos tomar?
Construir estrategias de solidaridad global con esfuerzos mancomunados entre las naciones, una vez que quede superada la crisis sanitaria es la clave para enfrentar un futuro lleno de incertidumbres, donde prime el dialogo y el debate plural y multidisciplinario, como herramientas éticas para el desarrollo colectivo. Una de las decisiones fundamentales es colocar en el centro de la reflexión y de las agendas políticas a la cultura, a la educación y a la investigación, comprender el rol fundamental que han cumplido y cumplen estas esferas durante la crisis y en la pospandemia. Atender a las dificultades que hemos debido sortear los principales actores, tanto educativos como intelectuales, científicos y hacedores culturales, es decir, que se traduzca en mayores recursos e inversión destinados a estos sectores, lo cual deberá ir de la mano de la recuperación económica del país.