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El arte plástico como espacio de encuentro

Mujeres de los barrios La Palaya y Escorihuela de Rodeo de la Cruz encontraron a través del arte un espacio de complicidad para hacer valer sus derechos. Es una iniciativa de los Proyectos Mauricio López, coordinada por Laura Montes, e integrada por estudiantes y graduados de la carrera de Trabajo Social, la Asociación Incluir y el Jardín Amanecer.

imagen El arte plástico como espacio de encuentro

Unidas, vamos caminando es el nombre de la iniciativa resultado de un “proceso que se dio hace un par de años cuando fuimos dando cuenta de la soledad que atravesaban  las mujeres del barrio en ciertos aspectos y situaciones. Comenzamos a trabajar con la Asociación basándonos en la educación contextualizada  y detectamos la falta de espacios de participación de las mujeres” explicó Claudia Coll, directora del Centro Educativo de Origen Social Amanecer. “Así surgió este espacio a través de mateadas”, continuó Inés Gálvez, trabajadora social e integrante de la Asociación Incluir.

 Se trata de un espacio de encuentro de las mujeres que concurren al Jardín Amanecer en el que, “al principio, se charlaban sobre temas referidos a la crianza (porque muchas de ellas están solas en esta función). Ahora no sólo hablamos de eso sino que también problematizamos algunos mandatos culturales que recaen sobre ellas y buscamos entre todas el asesoramiento indicado para las problemáticas que atraviesan”, dijo Inés.

Participan de este espacio mujeres de entre 20 y 40 años. Si bien se reúnen en el Jardín, el espacio está abierto a toda la comunidad. “A medida que transcurría el tiempo, empezaron a participar dos mujeres de la comunidad que son artistas plásticas, una de ellas en cerámica. Así surgió la idea de hacer un  mural en el que se plasmara los temas que se habían trabajado en los encuentros”, aseveró Claudia.

En este sentido, los proyectos Mauricio López le brindaban a estas mujeres la posibilidad de fortalecer este espacio “y pensar a la mujer no sólo como mamá sino en la comunidad y fue lo que nos permitió generar esto que se ve plasmado en el mural. El desafío era visibilizar lo que tienen las mujeres para decir desde lo que pueden decir y hacer” agregó Inés. Dicho mural se realizó en la pared de la casa de una de las mujeres que participan del espacio y fue inaugurado el pasado 18 de octubre. “La idea es que este mural sea el puntapié para hacer otros más que visibilicen el rol de la mujer en la comunidad”, concluyó Inés.

Respecto de la relación de la Universidad con la Sociedad, Claudia destacó la importancia que tiene ese tipo de acciones y rescató la experiencia reciente del intercambio que los Proyectos Mauricio López promovieron con la Universidad Alberto Hurtado de Chile. “Tuvimos la experiencia de hacer intercambio con unos alumnos de Chile y vimos la participación activa a partir del involucramiento con la comunidad. Eso permite el enriquecimiento mutuo, el intercambio de saberes y el aprendizaje comunitario.

Unidas, vamos caminando forma parte de la sexta convocatoria de los Proyectos Mauricio López. Los mismos apuestan a la conjugación del compromiso social con la calidad educativa.  Para más información sobre la iniciativa comunicarse al 4135000 int. 3011 o a proyectosml@uncuyo.edu.ar

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