Este grupo de alfabetizadores está integrado por estudiantes y profesionales de la UNCuyo y trabaja desde hace tres años en el Barrio Lihué gracias al acompañamiento del Progrma de Inclusión y en coordinación con otras organizaciones como la Feria de Guaymallén y la Unión Vecinal San Sebastián del Barrio Lihué.
Este proyecto nace en el espacio de la Feria Popular, a partir de un problema de desalojo en el año 2014 y las asambleas que se suscitaron. “A partir de esa problemática se empezó a hablar sobre la posibilidad de alfabetizarse visto que la lecto-escritura era una necesidad para poder acceder a los derechos, a acciones y gestiones que demandaba poder hacer eco de las problemáticas que se estaban viviendo en nuestro barrio. Desde ese momento nos organizamos para poder encaminar el carrito de saberes. Este nombre tiene que ver con el oficio de las feriantes y el instrumento del carrito, con los sueños y los aprendizajes que portan cada una de ellas y que se dan en el espacio del intercambio de saberes. Este proyecto lleva tres años y actualmente lo integran 15 personas, todas ellas son mujeres, vecinas y trabajadoras de Guaymallén, que además son quechuas parlantes lo cual nos convoca a abordar la alfabetización con una mirada intercultural”, comentó Nancy Colque, estudiante de Comunicación Social e integrante del proyecto.
Lugo de tres años de trabajo, se inauguró un aula satélite en el Barrio, lo que permitirá acreditar las competencias adquiridas en el proceso de alfabetización. “Después de tres años de alfabetización en espacios de educación no formal surgió la inquietud por articular con algún centro de adultos y así las chicas podrían acreditar sus saberes. Así fue factible conformar aquí un aula satélite de ese centro para que se puedan continuar las trayectorias educativas tales como: la terminalidad de la primaria y el inicio de la secundaria”, explicó Victoria Martínez, Lic. En Sociología e integrante del equipo de alfabetizadores.
Cristina Guiñazú hace cuatro meses que participa en las actividades del “Carrito de Saberes”: “estoy aprendiendo poco a poco a leer y a escribir. Los chicos tienen mucha paciencia con nosotros. Yo no tuve la oportunidad de ir a la escuela cuando era chica así que lo estoy haciendo ahora de grande y nunca es tarde para aprender a leer y a escribir. Me gusta venir acá porque siento que es un avance, que pronto me voy a poder manejar por mi misma”, expresó.
El proyecto “Carrito de Saberes” busca consolidar el proceso de alfabetización mediante el fortalecimiento de los procesos de aprendizaje de lecto-escritura y de matemática; la generación de espacios de diálogo de saberes culturales y generacionales entre educadoras/es y educandas; el fortalecimiento de los lazos afectivos y de confianza entre los actores que conforman el proyecto: equipo alfabetizador, destinatarias y miembros de la Unión Vecinal.