Cambio de rutinas, aislamiento, exceso de pantallas, distancia social y ansiedad. En este contexto, ¿qué se puede hacer para poder descansar y dormir bien? La médica Gabriela García (MP 9001), profesional de la Dirección de Salud Estudiantil de la Secretaría de Bienestar, nos propone cinco acciones, breves y sencillas, para ponerlas en práctica y poder dormir mejor.
Es importante recordar que durante el sueño el cerebro sigue trabajando pero con otro ritmo, se afianza la memoria. Dormir bien mejora el ánimo y fortalece el sistema inmune.
1. Mantener horarios de sueño: tener horarios similares a los que se tenía previo al aislamiento. Tratar de acostarse y levantarse a una misma hora. Dormir ocho horas.
2. Acondicionar el ambiente para dormir: hacer de la habitación un lugar agradable para dormir. Iluminación y temperatura adecuadas, cama y almohadas cómodas.
3. Tener una alimentación sana: antes de ir a dormir no consumir café, té o mate. Cenar liviano.
4. No abusar de las pantallas: la estimulación excesiva impide conciliar el sueño y disminuye su calidad. Por eso, apagar todos los dispositivos un rato antes de acostarse.
5. Generar una rutina previa a dormir: tratar de relajarse, desconectarse del trabajo o del estudio antes de dormir. Se pude escuchar música o tener una lectura liviana.