Para disfrutar del verano sin riesgos debemos tener ciertos cuidados, principalmente frente a las altas temperaturas. La doctora Gabriela García (MP 9001), profesional de Salud Estudiantil, nos brinda algunas recomendaciones para prevenir el golpe de calor.
Ante la ola de calor
- Beber agua y líquidos con frecuencia, aunque no se sienta sed.
- Prestar especial atención a bebés y niños pequeños, adultos mayores y personas con enfermedades que puedan agravarse con el calor y la deshidratación.
- Permanecer el mayor tiempo posible en lugares frescos, a la sombra o climatizados y refrescarse cada vez que se necesite.
- Usar ropa ligera, holgada y que deje transpirar.
- Mantener los medicamentos en un lugar fresco ya que el calor puede alterar su composición y sus efectos.
Cómo alimentarse
- No abusar de las bebidas con cafeína, alcohol o grandes cantidades de azúcar.
- Hacer comidas ligeras que ayuden a reponer las sales perdidas por el sudor (ensaladas, frutas, verduras, zumos, sopas frías) Se recomiendan platos a la plancha, hervidos o asados. Evitar fritos, rebozados y precocinados.
- Lavarse las manos con agua y jabón antes de manipular alimentos.
- Realizar un correcto lavado de frutas y verduras. Cocinar bien los alimentos y procurar consumirlos a la brevedad protegiéndolos de los insectos. Mantener siempre la cadena de frío.
Cómo protegerse del sol
- Evitar la exposición solar entre las 10 y las 16 hs., incluso en los días nublados.
- Usar sombreros (preferentemente con ala ancha para proteger cuello y orejas).
- Usar lentes de sol que absorban el 100% de las radiaciones ultravioletas. Es importante que lleven el marcado CE como garantía de calidad.
- Usar cremas solares con filtros de protección UVA y UVB con un factor adecuado a cada tipo de piel (superior a 15). Se deben aplicar en todo el cuerpo al menos 30 minutos antes de iniciar la exposición y repetir la aplicación luego de bañarse.