Saltar a contenido principal Saltar a navegación principal

Una semana para concientizar sobre el consumo de sal

La Secretaría de Bienestar Universitario, a través de la Coordinación de Salud Integral, se suma a la “Semana Mundial de Sensibilización sobre el Consumo de Sal”, con una campaña de concientización.

imagen Una semana para concientizar sobre el consumo de sal

Del 8 al 12 de marzo se realizará “La Semana Mundial de Sensibilización sobre el Consumo de Sal”. Esta semana fue instituida por la World Action on Salt and Health (WASH) en el año 2005 para concientizar sobre el consumo de sal.

En nuestro país, en el año 2013 se sancionó la Ley Nacional 26.905 para promover de forma integral la reducción del consumo de sodio. En esta Ley se establecen los valores máximos de sodio según grupos alimenticios, los plazos para que las industrias de alimentos reduzcan los niveles de sodio en los productos y la inclusión de etiquetas de advertencia, entre otras medidas.

Cabe destacar que en el año 2016, los comedores de la UNCuyo incluyeron entre sus proveedores a comercios certificados por el Programa “Menos Sal Más Vida”, que regula la incorporación de sodio en las preparaciones y trabaja en campañas de promoción de hábitos saludables en la población.  

En esta ocasión y sumándose a la Semana Mundial de Sensibilización sobre el Consumo de Sal, la Coordinación de Salud integral, realizará una campaña para redes sociales centrada en tres mensajes:

  • Atención a las etiquetas: la mayor cantidad de sodio que ingerimos proviene de productos elaborados (65-70%) como salsas, comidas untables, quesos, snacks y aperitivos. Por eso, es importante saber elegir los alimentos y leer las etiquetas.
  • Incorporar especias: cocinar y condimentar con especias permite dar sabor a las comidas sin necesidad de agregar sal.
  • Elegir en dónde comprar: en nuestra provincia existe la red de panadería certificadas por el Programa “Menos sal Más vida”, que regula el sodio en las preparaciones.

 

¿Por qué reducir el consumo de sal?

El sodio de una dieta alimentaria no solo proviene de la sal que utilizamos para cocinar o que agregamos con el salero, sino del aportado por los alimentos pre elaborados como panes, galletitas, enlatados, etc.

El sodio es indispensable para la vida, ayuda a mantener el cuerpo hidratado, a la relajación muscular y colabora en la transmisión de los impulsos nerviosos. Sin embargo, nuestro organismo solo necesita pequeñas cantidades. Por ejemplo, una persona adulta debería consumir menos de 5 gramos diarios.

El exceso de consumo de sal produce hipertensión arterial y aumenta el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares, padecer accidentes cerebrovasculares o infartos.

 

Contenido relacionado