La delegación nacional —que tiene a su cargo la ejecución del Programa de Evaluación Institucional (PEI)— estuvo encabezada por la directora de Objetivos y Procesos Institucionales, Laura Martínez Porta, y los integrantes de la coordinación de Evaluación y Mejoramiento de Instituciones de Ciencia y Tecnología, Ariel Toscano, Diego Haimovich y Matías Alcántara. 

Los recibió, en la sala del Consejo Superior, la rectora Esther Sanchez junto con la secretaria de Investigación, Internacionales Posgrado (SIIP), Teresa Damiani, y autoridades de las distintas unidades académicas. Luego, se trasladaron al Cicunc para participar de una jornada informativa sobre el proceso de evaluación y mejoramiento.

“Hoy damos inicio al segundo ciclo del Programa de Evaluación Institucional que, al igual que el proceso se inició en el 2011 y culminó en el 2019, constará de tres fases. Primero, la autoevaluación y actualización del diagnóstico inicial, seguida de la evaluación externa y con estos insumos, finalmente, elaboraremos e implementaremos los planes de mejoramiento para la función ciencia y técnica de nuestra Universidad”, dijo Sanchez.  

La Rectora planea que esta vez el proceso sea más corto y poder concluirlo en dos años, dependiendo del ritmo institucional: “Es un enorme desafío y una oportunidad inmejorable para realizar una valoración integral de una de las funciones sustantivas de la Universidad, la investigación, a la que hemos dado un rol estratégico en nuestra gestión”. 

Para llevar adelante esta tarea, Sanchez dijo que es primordial la participación de toda la comunidad: “Se necesita una construcción plural que permita identificar y sistematizar fortalezas, debilidades y potencialidades de desarrollos institucionales”. Consideró también que la evaluación externa permite una mejora adicional al diagnóstico propio. Por último, reiteró el compromiso de su gestión con la ciencia y la tecnología como fuente generadora de progreso y como herramienta transformadora de la sociedad.

Volver a evaluar para seguir mejorando

La UNCUYO fue una de las dos primeras universidades en ingresar al PEI. “Para nosotros es realmente un gusto poder estar acá iniciando un segundo ciclo”, dijo la directora Laura Martínez Porta, detallando, a su vez, que esta experiencia es un aprendizaje tanto para la institución como para el Ministerio y que es muy importante la participación de la comunidad.

“En esta etapa de autoevaluación de lo que se trata es de poner en análisis, en perspectiva, la función ciencia y técnica: cuáles son los objetivos de la función, cuáles son las capacidades para llevarla adelante, cuáles son las dificultades y cuáles son las estrategias para hacerles frente a estas dificultades y para lograr los objetivos. Esta herramienta de evaluación y de mejoramiento empalma con el diseño de estas líneas de mejoramiento que la Universidad va a proponer en adelante. Ojalá lo podamos hacer en dos años”, confió Martínez Porta.

En referencia al primer ciclo de evaluación institucional, la funcionaria mencionó que una de las dificultades de aquel momento fue el relevamiento, la generación de datos, lo cual tomó mucho tiempo, pero señaló que aún así se completaron  todas las etapas.

“Cambian los contextos, cambian las herramientas con las cuales podemos trabajar, y el compromiso del Ministerio se resignifica con las instituciones. Estamos en un momento donde es muy importante poder proyectarnos y seguir desarrollando y consolidando el Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología”, cerró Martínez Porta. 

En la visión de la secretaria Teresa Damiani, se trata de un proceso complejo, difícil, demandante, pero sumamente auspicioso y necesario para el crecimiento de la ciencia y la tecnología en la UNCUYO. “Estamos comprometidos para transitarlo de la mejor manera con la ayuda del Ministerio y con el involucramiento de toda la comunidad para hacer un diagnóstico real y un plan de mejoras que tenga un impacto importante en los próximos años”, afirmó.

Cómo le fue a la UNCUYO con su primera evaluación

La Universidad inició su primer proceso de mejora en el 2011 y lo finalizó en el 2019. Durante ese tiempo se elaboró una autoevaluación que luego se complementó con una evaluación de referentes externos. A partir de esos datos se construyó un plan de mejora institucional que se aplicó en las diferentes problemáticas que se detectaron en la etapa evaluativa.

 A partir del trabajo implementado, algunos logros fueron:

• Generación de un Sistema de Información Integrado.
• Formulación de indicadores y propuestas específicas en relación con la formación de recursos humanos, producción académica y contribuciones a la función I+D conforme a los estándares internacionales.
• Capacitación en metodología de investigación para profesores y doctorandos.
• Rediseño de la página web institucional y fortalecimiento de los espacios de divulgación.
• Tareas concretas de conectividad: obra civil, tendido de fibra óptica; interconexión de los nodos informáticos con los laboratorios; sistema integrado de documentación, interconexión de 15 laboratorios (12 de ellos en la Facultad de Ciencias Médicas).
• Seguridad e higiene de laboratorios: salidas de emergencia, alarmas, disyuntores y elementos de seguridad, mesadas, lavaojos, campanas, sistemas eléctricos renovados en los laboratorios de las diversas Unidades Académicas. Activación del Comité de Higiene y Seguridad.

Noemí María Girbal-Blacha, profesora emérita de la Universidad Nacional de Quilmes, investigadora superior emérita del CONICET, y directora del programa I+D CEAR-UNQ, fue miembro del Comité de Evaluadores Externos de la UNCUYO. En mayo de 2019 realizó un informe detallado sobre el proceso de evaluación y mejoramiento de la universidad mendocina donde destacó: “El PM de la UNCUYO hizo posible mejorar la calidad institucional, el aprovechamiento de los recursos financieros, la capacitación del personal, la formación y labor de los investigadores, la seguridad laboral y el equipamiento”. El informe completo se puede leer aquí.

Acerca del PEI

Es un espacio que depende de la Secretaría de Articulación Científico Tecnológica del MinCyT para promover la evaluación permanente y la mejora continua de las instituciones pertenecientes al Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación. En ese proceso trabajan con organismos de ciencia y tecnología y con universidades de todo el país en lo que atañe a la función Investigación y Desarrollo (I+D). 

Actualmente, el PEI se encuentra articulando con 64 instituciones: 8 Organismos de Ciencia y Tecnología (OCT) dentro de los cuales se encuentra el CONICET con sus 12 Centros Científicos Tecnológicos (CCT), 2 Centros Multidisciplinarios y 2 Centros Regionales de Investigaciones Científicas y Transferencia Tecnológica; 42 Universidades (32 de gestión pública y 10 de gestión privada).

El trabajo con las instituciones incluye dos componentes, un momento de evaluación que cuenta con una autoevaluación y una evaluación externa, y un diseño e implementación de un plan de mejoramiento en cada organismo.

El PEI cuenta con distintos perfiles para acompañar a las instituciones en su evaluación. Uno de estos es para aquellas que están iniciando un segundo ciclo de mejoramiento continuo, como es el caso de la UNCUYO. El financiamiento previsto para este perfil es de hasta 800.000 dólares (una parte la cubre el MinCyT y la otra, a modo de contraparte, la institución con sus recursos humanos, sus materiales y sus propias líneas de financiamiento).