El mosquito Aedes aegypti –ese que puede transmitir dengue si está infectado– es inteligente. Los seres humanos, también. Sobre esas dos verdades y frente a la necesidad de prevenir sus picaduras durante los próximos meses, Cecilia Domínguez (51), bióloga e investigadora del CCT Conicet Mendoza, dice que no estamos a merced del insecto, sino que podemos controlar la situación sabiendo que le gusta poner huevos en los recipientes artificiales que están a la sombra, en ese florero donde lucen las rosas de estación, en ese tarrito donde quedó el cogollo que robamos a la vecina, en el bebedero de los animales, en las canaletas, en el balde que dejamos a medio llenar. Repite que no estamos a merced de los astros, sino que debemos limpiar, cepillar, eliminar todos esos recipientes donde se acumula agua. O, lo que sería lo mismo, usar la inteligencia.
“Creo que el mensaje tiene que ser superpositivo, este es un problema que podemos controlar. No estamos a merced de los elementos naturales, de los astros, esto no es astrología, porque sabemos que el bicho pone huevos en recipientes artificiales que ponemos nosotros, que están a la sombra, en lugares oscuros, cobijados. Entonces, si nos ponemos las pilas y eliminamos esos recipientes artificiales, podemos controlar esta situación”, comenta a Unidiversidad.