Después de un largo proceso que comenzó hace unos meses, con paciencia, diálogo y mucha confianza en los procesos comunitarios, llegó la Fiesta de la Expresión. La motivación estuvo en un principio en Sandra Amaya, cantora popular mendocina, y Luis Vilchez, poeta popular puntano. El intercambio de expresiones artísticas entre ellos fue la punta del hilo que llevó a Sandra a invitar a la Secretaría de Extensión Universitaria a pensar un espacio y un momento de expresión con participación y organización popular.
La fiesta comenzó el jueves 24 de mayo en la Radio Escolar La Gloria, ubicada en la escuela Padre Pedro Arce del Barrio La Gloria de Godoy Cruz. Allí, Sandra Amaya y Luis Vilchez, junto a las titiriteras Lorena Membrives y Mariela Zobin, participaron del programa radial “Mamás y algo más” junto con su conductora Leticia. Recitar poesías, compartir la experiencia pedagógica de la radio, dialogar acerca de la propia vida fueron algunas de las actividades que colmaron la mañana. Además, Sandra cantó en vivo “Mujeres del mundo”, dedicada a todas las mujeres luchadoras, entre ellas principalmente a las “mamás y algo más”. Después, los visitantes grabaron para “La Gloria TV” derechos de los niños/as por ellos mismos inventados, relacionados con sus tareas artísticas. La filmación de estos videos estuvo a cargo de Exequiel estudiante de Comunicación Social.
Por la tarde del jueves se llevaron a cabo tres talleres en el Centro Cultural Urga, del Barrio Belgrano de Las Heras. Literatura, canto popular y percusión fueron las temáticas. Se experimentó como un espacio comunitario de aprendizaje recíproco. Niños y niñas, jóvenes, adultos, vecinos/as del barrio y artistas compartieron este momento reconociendo en el otro los saberes que siempre estuvieron allí.
Y ya el viernes por la mañana se celebraron junto a la Biblioteca Popular Pablito González del Barrio La Gloria los 20 años de vida. Una vida puesta al servicio del barrio, alimentando sueños, construyendo espacios de recreación y cultura. La fiesta empezó entonces con una peña con artistas del barrio y otros invitados. Una feria de microemprendedores/as y exposiciones artísticas realizadas en ese marco.
Y todos confluyeron en el Teatro Universidad a las 19 del viernes 25 de mayo. La recibida al Teatro estaba dada por los stands de las mujeres microemprendedoras del Barrio La Gloria que ofrecían sus productos y por la mesa de revistas populares. Entre ellas, “El viento, guturalmente hablando”, a la cual pertenece Luis Vilchez; “La chúkara”, de la Biblioteca Popular Pablito González; “La Mosquitera”, de Bermejo. Y la escenografía estaba compuesta por tapices de Elois Guarnieri y esculturas de Adrián Manchento.
Tres miembros de la Radio Comunitaria Los Sueños, del Barrio Yapeyú de Las Heras, fueron los conductores del evento. Cual radio abierta, animaron la tarde presentando a los artistas y haciendo breves entrevistas a cada uno de ellos. Le puso música a la fiesta la Murga Enviados de Momo, dando inicio a la tarde de expresiones con un recitado de Galeano “Los nadie”. Luego de la primera batucada, Ceferino Gómez deleitó con su canto lavallino, acompañado por su guitarra. Ariel Tello y el Tordo, del Barrio La Gloria, fueron los siguientes en el escenario compartiendo su amor por el Barrio la Gloria. A continuación, Elsa Campos, vecina del Yapeyú, recitó algunas de sus poesías, compartiendo con el público sus pensamientos y sentimientos más profundos. “Lo mío es la poesía de barrio”, dijo Elsa al concluir. Mientras los artistas deleitaban con sus expresiones, de fondo pintaba el artista plástico Federico Calderón, realizando una obra inédita que le inspiraba el momento.
Ya siendo las 21.30, Luis Vilchez se subió al escenario a compartir sus poemas. Se sumó Sandra Amaya, interactuando ambos en el escenario. Una canción y un poema fueron la dinámica que animó ese momento. Para cerrar la noche, la Baturga (murga del Barrio Belgrano) compartió su música de tambores. “Nos llamamos Centro Cultural Urga porque cuando éramos chicos urgábamos en el basural, viene de urgar, de buscar… y decidimos que el centro cultural tenía que ver con buscar dentro nuestro, dentro del barrio”, explicó el Mono, de la Baturga. “Es más, nosotros no organizamos, sino que urganizamos… que es más difícil”, añadió la Piojo.
Al ritmo del tum tum de la Baturga el Teatro salió a la calle a compartir la alegría del encuentro entre unos y otros. Y culminó la Fiesta con un abrazo simbólico en las veredas del Teatro entre los miembros de las dos murgas. Una fiesta que dejó huellas, que imprimió sentires y recorrió barrios. Porque el arte de los barrios también puede habitar el teatro.
