La exhibición a cargo de la secretaría de Extensión Universitaria, a través del Área de Patrimonio y el Museo Universitario de Arte, se enmarca en los festejos patrios con motivo del 25 de Mayo y se presentará el 24 de mayo, a las 12, en el Espacio de Arte del Rectorado.
La obra de Bañeros es el resultado de un proceso que parte del dibujo, su motivación generadora que toma la línea como protagonista. Con ella registra surcos, incisiones, huellas y trazos que, en su conformación globalizadora, alude a lo identitario del paisaje mendocino: la viña.
Propone, más que un análisis pieza por pieza, un acercamiento que indagará en la pauta que conecta, a modo de hilo conductor, sus primeros dibujos con sus pinturas y sus circuitos electrónicos para concluir con los objetos lumínicos.
En su proceso de búsqueda, pasa del dibujo a la pintura y se instala en la encrucijada del arte contemporáneo con la incorporación de nuevas tecnologías, presentando una obra que está dispuesta a operar ante su observador. Su forma cambia ante la percepción inestable que, lejos de ofrecerse como objeto acabado, integra al observador y lo hace partícipe de un dispositivo en el que resulta parte activa.
Cristina Bañeros junto a una de sus obras
Al respecto Vivian Magis, coordinadora del Área Artístico- Cultural, aseveró “es una obra que está dispuesta a operar ante su observador. Su forma cambia ante la percepción inestable que, lejos de ofrecerse como objeto acabado, integra al observador y lo hace partícipe de un dispositivo en el que resulta parte activa”.
La muestra ha recibido visitantes de toda la comunidad, en especial durante la visita guiada que organizó la artista en mayo. En dicha oportunidad, se abordaron las ideas inspiradoras asociadas al paisaje: la bóveda, las tramas cinéticas jugando con el diseño del anfiteatro, la huella digital, los reflejos y la luz.
La muestra estará disponible hasta el mes de agosto en el Espacio de Arte “Luis Quesada”, en el hall del Rectorado.