Con la premisa de brindar un aporte solidario en el área de salud a un grupo de niños pertenecientes a un contexto sociocultural muy afectado, un grupo de extensionistas se avoca a realizar atención odonto-fonoaudiológica con el fin de favorecer el normal desarrollo y crecimiento de niños en edad escolar. Este proyecto se lleva a cabo en la Escuela Maestra Olimpia Raso Di Chiara, que se encuentra en el barrio Jorge Newbery, del departamento de Las Heras.
Las familias de esa zona viven en condiciones de extrema pobreza y marginalidad, por lo que las mujeres adquieren “un rol protagónico a la hora de buscar soluciones. Se observa que en la composición de las familias hay en general una “gran cantidad de hijos, factor acompañado por la presencia de un “importante porcentaje de trabajo infantil.
Todas estas problemáticas derivan en que la situación “limita en muchos de ellos la posibilidad de inculcar hábitos de higiene y controles médicos y odontológicos”. A partir de esto es que el equipo que actualmente lleva a cabo las tareas fue “convocados por madres y maestros de la zona para concurrir y apoyar este área de la salud bucal”, gracias al contacto “establecido en las visitas de la cátedra” durante el año 2011, explicó Laura Giromini.
El grupo de extensionistas es coordinado por la docente Laura Giromini y su equipo se compone de estudiantes, egresados y docentes de las carreras de Odontología y del Profesorado de Grado Universitario de Sordos y Terapia del Lenguaje. El proyecto pertenece a la convocatoria de Proyectos Mauricio López. Los extensionistas trabajan en articulación con actores de la Escuela y la Fundación Bologna Mendoza.
Mediante el trabajo conjunto se “pretende sensibilizar a la población sobre la importancia de la prevención en los niños de los problemas o alteraciones en la respiración deglución, fonación, oclusión y hábitos de higiene bucal”, como así también “la importancia de la detección precoz de alteraciones que tratadas a edades tempranas tendrán mejor pronóstico y tratamiento”. Según Mónica Coz, directora de la escuela, “el impacto del proyecto es impresionante”. En relación a la educación sobre “salud bucal, que era una falencia muy grande que teníamos, hemos subsanado casi en un 100% esa dificultad”, asegura Mónica.
Sobre el trabajo interdisciplinario, Jésica von Zedwick, estudiante de cuarto año del Profesorado de Grado Universitario de Sordos y Terapia del Lenguaje, y miembro del equipo extensionista, dice que “es muy importante, hay muchos aspectos en los que en la carrera no te preparan”. Agrega que en la práctica extensionista y el trabajo interdisciplinar aparecen “preguntas y cuestiones que cursando no surgen”.
Para lograr su acometido, el equipo hace uso de estrategias tales como clases lúdicas y talleres ateneos destinados a los niños que asisten a la institución, a la vez que “la formación en campo de los estudiantes constituye una valiosa experiencia de práctica pre-profesional, puesto que permite la aplicación de conocimientos en contacto con una realidad social particular en este lugar geográfico”, agregó.
Respecto del diálogo de saberes, Jesica dijo que “nunca había visto una realidad tan marginal”. Además, afirma que “en el centro, uno se queda con lo que le dan en la Facultad, con el prototipo de familia y de sociedad”. “Al principio fue fuerte, cada vez me fui haciendo más preguntas sobre la realidad”. Mónica agrega que “el conocimiento de la Universidad ha llegado a la comunidad a través de lenguaje sencillos y explicaciones” didácticas. Agrega que “las profesionales también han aprendido de una comunidad que, de alguna manera, siempre tiene algo que ofrecer en conocimiento”.
La Escuela Maestra Olimpia Raso Di Chiara cuenta con un “grupo de docentes y madres de cooperadora muy comprometidos con la problemática social y cultural de las familias del barrio, conociendo puntualmente las carencias y necesidades individuales de cada caso”. Por su lado la Fundación Bologna “es una Institución que cuenta con el patrocinio académico de la Facultad de Ciencias de la Formación de la Universidad de Bologna, Italia” y que “realiza su actividad dando particular importancia al análisis, estudio, formación y actividades solidarias en las áreas estratégicas relativas a la inclusión educativa, social y cultural”.
En cuanto al papel de la Universidad y su relación con la comunidad no universitaria, Jesica cree que es “mínima, se podría hacer más”. Continúa diciendo que con el aporte de sus “papeles de estudiantes”, “la relación de la Universidad con la sociedad de manera directa, puede atrapar cosas que el hospital no”. Por su lado, la directora de la escuela concluyó que “sería muy bienvenido que la Universidad se involucrara más con la realidad social de las comunidades” para seguir “acrecentando”, esa relación, “a través de otros proyectos”.
Para más información sobre el Proyecto, comunicarse al 4135000 int.3011/3076