Frente a la problemática ocasionada por la dificultad de acceso a la cultura de parte de las familias que habitan en zonas rurales, un grupo de extensionistas trabaja en un proyecto con la intención de aprovechar el “enorme potencial que tienen los niños, desde lo artístico”, rescatando elementos culturales pertenecientes a las culturas originarias de los habitantes de Costa de Araujo, en Lavalle, cuyas familias son mayoritariamente provenientes del norte de Argentina y de Bolivia.
El equipo dedicado está compuesto por estudiantes de las carreras de Profesorado en Música, Licenciatura en Instrumentos y Licenciatura en Música Popular, coordinados por el docente Arturo Eduardo Tascharet.
Los extensionistas buscan combinar los saberes comunitarios que poseen los destinatarios y los saberes académicos a los que han accedido a partir de su formación en sus respectivas carreras.
Ellos aseguran que se puede observar motivación, capacidades y facilidad en los niños y sus familias con respecto a la música andina, dado que ellos están familiarizados con ciertos ritmos o músicas que se relacionan con su lugar de origen, como así también un marcado “valor de la unidad y trabajo conjunto, y la horizontalidad en la toma de decisiones”.
A través de estas herramientas, el grupo busca aprender del trabajo en comunidad, ya que algunos de los integrantes tienen experiencias en instituciones educativas, como escuelas primarias o artísticas, pero no en organizaciones sociales, y que al mismo tiempo puedan aplicar los conocimientos que aprendidos en la facultad y “aprender de las personas de la comunidad, de sus formas de organizarse y de lo que ellos saben de la música de sus lugares de origen”.
El diálogo de saberes es una función fundamental en el desarrollo de los proyectos de extensión “Prof. Mauricio López”. María Julia Sabez, integrante de la OTRAL, dijo que para ella los saberes comunitarios y los académicos han estado bien integrados. “Ellos traían sus canciones, muchas tenían que ver con historia de sus familias, y a la vez estaba la pata de los estudiantes de Música, que aportaban desde lo teórico”.
Como elemento sostenedor del proyecto, se tiene como meta dejar funcionando en la comunidad la Banda de Música andina, la cual al haber incluido a las familias y a la organización en el proceso continuaría con la coordinación de los miembros de esta.
Todo esto apunta a “aportar al desarrollo integral de niños y familias de Lavalle, a través de la música comunitaria andina como herramienta de transformación social”. Además, se apunta a lograr un espacio de encuentro y expresión a través de la música entre los niños, sus familias y la Universidad; revalorizar de los saberes populares a fin de integrarlos a la identidad y la memoria colectiva y “socializar la experiencia a través de recitales en la comunidad”, entre otros objetivos.
Respecto de la relación de la Universidad con la comunidad, Sabez expresó que “el equipo de Extensión ha avanzado un montón en ese sentido. Falta muchísimo, falta integrar mucho más esos saberes comunitarios, el trabajar con una comunidad, conocerla y que las facultades se sumen a lo largo del tiempo, como es el caso de Uruguay o de otras Universidad que ya lo hacen”.
Para más información sobre el Proyecto, comunicarse al 4135000 int. 3011/3076.