El creador del mítico Cuarteto Cedrón, viene a Mendoza para deleitar al público con sus grandes clásicos y presentar su último material. Además, rescatará tangos viejos de Gardel, de Homero Manzi, y obras contemporáneas del propio Cedrón y de otros autores.
Acompañado por Miguel López en bandoneón, presentará obras de su último CD doble, que cuenta con poesías de Miguel Ángel Bustos en “Corazón de piel afuera” y de varios autores en “Godino”, como Paco Urondo, Pedro Atienza, Raúl González Tuñón, David Alvárez Morgade.
Las entradas tendrán un valor de 50 pesos y de 30 pesos para estudiantes y jubilados de la UNCUYO. Las mismas estarán a la venta en la boletería del Teatro desde el
lunes 16 de lunes a viernes de 18 a 22 y sábado de 10 a 13 y de 18 a 22.
La poética del Tata Cedrón se sostiene y se funde en la poética que musicaliza. En esa decisión estética opera una política artística que no condesciende, precisamente, con la amabilidad. En los 36 discos que su carrera, desde aquel primero en 1964 titulado “Madrugada”, se pasa de un mix melanco-montonero de Juan Gelman y Paco Urondo a poemas malditos de Dylan Thomas, se hace fuerte en la genialidad de Raúl González Tuñón (ese universo urbano, portuario, de varieté, circo, callejones de medias rotas, pescadores y marginales a punto de desfallecer o de dar el gran salto), y también se rescata a Acho Manzi poeta y, si eso fuera posible, a su padre Homero; pone en foco el elegante lunfardo del gran Luis Alposta y define una cosmogonía invariablemente arltiana.
En 2004 el Tata decidió volver a vivir a Argentina luego de 30 años de exilio. Durante su residencia en Francia el Cuarteto despedregó nombres nacionales y armó a su modo un mapa de la poesía argentina dando a conocer al mundo entero algunos nombres por entonces desconocidos de la poesía contemporánea argentina. Sin libro, sin papel, esa poesía penetró en los oídos de un público que hablaba todas las lenguas. Y junto con los nombres de un Raúl González Tuñón, de un Julio Huasi, de un Paco Urondo, ese público se familiarizó con Homero Manzi, Cátulo Castillo, Enrique Cadícamo –a quienes ya conocía por otras vías–, pero también con Troilo, Pugliese, Gobbi.
Cedrón se instaló en Villa de Parque, donde desde una verdulería canta los días feriados para todo el que quiera escucharlo.
La trayectoria artística de Juan Cedrón es la de un grupo. El Cuarteto Cedrón nace en Buenos Aires en 1964 (al principio fue un trío), y empujado por el exilio se traslada a París a partir de 1974. Luis Mangieri dijo alguna vez que los años ’60 no podían entenderse sin el Cuarteto Cedrón. Es que el Cuarteto Cedrón es el sonido de una época, es aquel grupo de músicos argentinos que irrumpió en la escena porteña, renovando la relación entre música y poesía, dentro de una tradición a la vez urbana y popular. “Usar poesía que no fue escrita para ser canción me permitió romper con estructuras de la canción tradicional que viene de canciones de mi infancia, melodías que aprendí cuando era chico, con la gloria de las años ’40. Cuando hago canción está todo ahí dentro”, explica el Tata.
Hijo del tango, de sus múltiples raíces, de sus diversos aportes, el Cuarteto Cedrón forjó su propio género, siempre cerca de una tradición, siempre lúcido respecto a su presente, siempre indagando en la posibilidad de un más allá. El repertorio de este grupo no admite clasificaciones simplistas. Si bien el tango ocupa un lugar central en la obra del Cuarteto, ésta cuenta también con milongas, valses, candombes, canciones camperas...
Para más información comunicarse a culturalseu@uncu.edu.ar 4135000 –
int. 3024 (horario de mañana) 4204550 (horario de tarde) 155 469048 –
155 511050
Afiche en alta resolución
(zip - 723,3 KB).