Los crímenes de odio son delitos marcados por el prejuicio, la aversión y la discriminación hacia determinados grupos de personas. Son actos voluntarios y consientes, generalmente realizados con saña, que incluyen violaciones del derecho a la dignidad, a la no discriminación, a la igualdad, a la integridad personal, a la libertad personal y a la vida. Esta agresión tiene la intención de causar daños graves o la muerte, y está basada en el rechazo, desprecio, odio y/o discriminación hacia un colectivo de personas históricamente vulneradas y/o discriminadas, incluyendo al colectivo de personas de la comunidad LGBTTNBIQ+.
Desde la Dirección de Género y Diversidad de la UNCUYO expresamos nuestro mayor repudio frente al crimen de odio ocurrido en Barracas, que atentó contra la vida de cuatro lesbianas, causando el fallecimiento de Andrea Amarante, Pamela Cobbas y Roxana Figueroa, y afectando gravemente la salud de Sofía Castro Riglos.
Creemos firmemente en la igualdad de derechos y en la necesidad urgente de construir una sociedad inclusiva y justa, donde cada persona pueda vivir libre de violencias, miedo y persecución.
En este contexto, redoblamos nuestro compromiso de trabajar incansablemente en la promoción del respeto a la diversidad y en la lucha activa por erradicar toda forma de violencia y discriminación por motivos de género, identidad de género y orientación sexual.
A través de la educación, la capacitación continua en perspectiva de género y diversidad, el fortalecimiento de las herramientas institucionales contra las violencias y el compromiso de toda la comunidad, hacemos de nuestra universidad un espacio seguro.