El 2 de julio de 1985 se lanza al espacio una misión no tripulada de la ESA (European Space Agency) cuyos fines eran la investigación del Cometa Halley. Fue enviada una sonda espacial llamada Giotto en honor al pintor italiano Giotto di Bondone, que pintó al Cometa y fue inmortalizada como la Estrella de Belén.
La sonda Giotto ha sido la que más se ha aproximado al cometa, a una distancia de 596 km del núcleo del cometa, siendo la quinta sonda de la humanidad en aproximarse a uno de estos objetos (dos soviéticas y dos japonesas) y la última de la llamada Halley Armada, que es un grupo de misiones con vistas al estudio del cometa.
Durante el encuentro la cámara de televisión de la sonda fue destruida por las partículas de polvo provenientes del cometa. Cabe destacar que la traslación del Halley es retrógrada, por lo que la velocidad de la sonda con respecto al núcleo era de 70 Km/s, de ahí el gran daño que generaban esas partículas, sin embargo se lograron tomar imágenes que han ayudado a los astrónomos y científicos a describir el cometa.
Luego de no poder acercarse más, la sonda fue reubicada para poder lograr que la trayectoria de Giotto fuera ajustada de cara a una nueva misión al cometa 26P/Grigg-Skjellerup y sus instrumentos fueron apagados, realizando una maniobra de asistencia gravitatoria con la Tierra el 15 de Marzo de 1986, a una distancia de 22.730 Km. En 1990 la sonda fue reactivada para preparar el sobrevuelo al Grigg-Skjellerup, en la que dos años después, en 1992, la sonda pasó a aproximadamente 200 kilómetros del núcleo del cometa 26P pasando por el lado en sombra de este.
Después del encuentro con su segundo cometa la sonda fue apagada nuevamente el 23 de Julio de 1992, en 1999 sobrevoló la Tierra por segunda vez pero no fue reactivada.