Por María Gabriela Lenzano - Doctora en Ingeniería. Investigadora adjunta del Conicet. Gentileza Diario Los andes
Emplazado en la Patagonia Austral Argentina, en la cuenca hidrográfica del río Santa Cruz, la más importante de esta región, el glaciar Perito Moreno es un atractivo turístico singular de nuestro país.
Disfrutar de su majestuosidad contemplando el paisaje e incluso transitar por su superficie lo convierten en un escenario natural único.
El glaciar avanzó hace aproximadamente un siglo y adquirió una posición muy cercana a la península de Magallanes. Desde entonces, condicionado por la topografía circundante, ha experimentado pequeños avances y retrocesos, en un rango menor a los 150 metros. Cuando el glaciar se acerca a esa península, suele generar un represamiento del lago Rico ocasionado por un dique de hielo. Dicha situación, es anómala respecto a la que experimentan la mayoría de los glaciares en el mundo, que han mostrado una importante tasa de retroceso durante los últimos 150 años. En este sentido, Sudamérica no ha sido una excepción, diversos estudios han evidenciado dicha situación y en los Andes Patagónicos los glaciares han sufrido un importante retroceso que se ha acrecentado durante la mitad del siglo XX.
Fenómenos posibles
Los glaciares al avanzar pueden ocasionar en algunos casos fenómenos naturales que ocasionan desastres y amenazas en los ambientes ubicados aguas abajo. Estos procesos mediante obstrucciones de diques naturales suelen generar una situación denominada drenaje repentino de fluidos (outburst floods, por sus siglas en inglés). Para que esto se produzca debe existir una falla/rotura del material, por ejemplo, hielo y de esta manera se libera el agua almacenada aguas arriba.
Estos procesos de rompimientos de diques de hielo pueden ocurrir periódicamente con un período de uno a 10 años. Según estudios antecedentes, existen 69 glaciares en el mundo que han producido represamientos de lagos debido a sus avances. Estos glaciares han sido clasificados de acuerdo con el tipo de represamiento, donde el glaciar Perito Moreno es un caso particular. El glaciar Moreno ha registrado 30 eventos de represas/rupturas de diques de hielo, el primero en 1917 y el último en marzo de 2018. Estos eventos son parte de la dinámica del glaciar adquirida durante el último siglo, que genera oscilaciones frontales dando lugar a ciclos recurrentes de avance, cierre, represamiento, falla/ruptura y el posterior retroceso del frente.
Muy estudiado
Numerosos estudios se han llevado a cabo en el Perito Moreno durante las últimas décadas. El grupo del Departamento de Geomática del Instituto Argentino de Nivología, Glaciología y Ciencias Ambientales (Ianigla), del Conicet, ha abordado el estudio acerca de los mecanismos de los represamientos del glaciar y por primera vez, se ha encarado la dinámica de las oscilaciones cíclicas estacionales que denominaron ACAR (Avance, Cierre, Apertura y Retroceso). Además, se adiciona la generación de un modelo numérico del comportamiento de la dinámica del glaciar que posibilita efectuar simulaciones temporales de los eventos ya registrados durante el periodo 1994-2018. Estos estudios estuvieron basados en primer lugar en técnicas de sensoramiento remoto, colocación de cámaras fotográficas para monitoreo diario continuo, evaluación de los niveles de altura del agua del Brazo Rico y lago Argentino, y por último, el diseño y desarrollo del modelo numérico denominado MO-ACAR, mediante el uso de técnicas computacionales.
El concepto ACAR está relacionado con el avance del glaciar hacia la Península de Magallanes, donde el paso del agua a través del canal denominado Canal de los Témpanos, a medida que avanza queda reducido hasta quedar completamente cerrado.
Entonces el glaciar represa a través de la generación del dique de hielo y su posterior evolución mediante la formación de un túnel, produciéndose los denominados ciclos de carga sobre el Brazo Rico. Esta situación genera una elevación del nivel de la altura de agua sobre el Brazo Rico donde la persistencia del dique de hielo depende de factores intrínsecos de cada evento. Una vez que se produce la ruptura del dique, se abre el canal y se genera la descarga sobre las aguas del lago Argentino, que es definida con características rápidas, progresivas y menores que dependen de la robustez del dique de hielo. Luego, se produce el retroceso del glaciar. Este sistema cíclico de retroalimentación hasta aquí explicado se repite produciendo el recurrente proceso oscilatorio.
Los resultados arrojaron que si el avance del glaciar no es lo suficientemente robusto para superar la retracción frontal causada por la ablación por desprendimiento o calving (por sus siglas en inglés) antes que el glaciar alcance a la Península de Magallanes, entonces experimentará oscilaciones mínimas. Cabe destacar, que la ablación frontal por calving está relacionada con el proceso mediante el cual el glaciar pierde su masa en su frente. Por el contrario, si el avance del glaciar supera al proceso de ablación durante su aproximación, entonces se produce el cierre completo del canal y se forma el dique de hielo. Una vez establecido el dique, la velocidad del agua del flujo tiende a disminuir a cero y la ablación se reduce considerablemente favoreciendo el llenado sobre el Brazo Rico y la futura formación de un túnel de hielo.
Además, mediante la simulación se demostró que el movimiento del glaciar está controlado primariamente por la temperatura ambiental, la topografía y la característica del evento previo de represamiento. Esto último es de suma relevancia, dado que el evento previo determinará el lapso temporal que transcurrirá hasta que un nuevo evento se produzca. Actualmente, el grupo sigue trabajando en estudios y simulaciones relacionadas con la pérdida de su régimen oscilatorio, abandonando así su valiosa condición de accesibilidad actual, que hace que esta maravilla natural única pueda ser visitada por miles de turistas cada año.