“Enoturismo en el Valle de Uco: lo que hicimos, lo que nos falta y cómo seguimos" fue la premisa del taller que tuvo lugar en el Hotel Turismo de Tupungato y que convocó a distintos actores vinculados al turismo del vino, interesados en conocer cuál es la realidad del sector.
La capacitación, que fue libre y gratuita, es una de las acciones de fortalecimiento, junto al análisis de la oferta enoturística, que vienen realizándose como parte del programa de Gestión Territorial, en el marco del “Plan Nacional de Turismo del Vino” de la Secretaría de Turismo de la Nación. La UNCuyo, a través de la Secretaría de Relaciones Institucionales, Asuntos Legales, Administración y Planificación, en conjunto con otros organismos como el Ente Mendoza Turismo y Bodegas de Argentina, es la encargada de la asistencia técnica tanto para este eje, como para el Observatorio de Enoturismo y para el Sistema de Información Georreferenciada, ya que los tres programas son complementarios.
Junto al intendente Gustavo Soto encabezaron el taller Mariángeles Samame, directora de Desarrollo de Productos turísticos de la Secretaría de Turismo de la Nación y Fernanda Bernabé, Coordinadora de Políticas Públicas y Planificación de la Universidad. De esta misma área, Rodrigo González, fue quien presentó algunas estadísticas del Valle de Uco, relevadas a partir de diagnósticos que realizaron en 15 provincias desde el Observatorio de Enoturismo y Gabriel Fidel, además, aportó los conceptos de innovación y creatividad para el sector.
“El desafío que tenemos como Universidad Nacional de Cuyo es coordinar y ser parte del Plan aportando nuestra capacidad técnica pero, además, nuestra capacidad de colaboración con otras instituciones para poder implementar una política pública que impacte en el desarrollo económico de nuestro país”, aseguró Bernabé, acerca de objetivo que persigue la Universidad.
Además, la coordinadora resaltó la importancia que tiene este tipo de talleres. “El territorio es el que le da vida al Plan, para poder luego sistematizar. Lo que no sería posible sin los protagonistas”, puntualizó.
Samame, por su parte, señaló que: “está cada vez más demostrada la potencialidad que representa la enogastronomía para el desarrollo turístico. El federalismo que tiene no sólo la gastronomía, sino el turismo del vino que ya va pintando cada vez más el mapa del mundo”.
El Intendente anfitrión habló de que los datos positivos para el enoturismo son “fruto de un trabajo serio y sistémico de la industria. Pero también basado en políticas públicas tanto a nivel nacional como local y gracias a instituciones como la Universidad”.
Luego de las ponencias, Carolina Fuller, Matías Michelini y Diego Stortini –referentes del sector- tuvieron como mediador a Gabriel Fidel y reflexionaron sobre el presente y futuro del enoturismo en el Valle de Uco. El cierre estuvo en manos de Cristina Mengarelli, Directora de Desarrollo Turístico del Emetur, que alentó a una “apertura mental” de cara al futuro.
Panorama del Enoturismo en el Valle de Uco
En este taller se presentaron algunos de los datos relevados por el Observatorio de Enoturismo, que vino a saldar una deuda en cuanto a sistematización de datos ya que los últimos relevados en la provincia a nivel oficial eran de 2013.
Según lo obtenido a partir de encuestas realizadas en el tercer trimestre de 2018, el Valle de Uco suma 24 bodegas abiertas al turismo. A nivel provincial, representan un 16 por ciento del total -alrededor de 150- y el 10 por ciento a nivel nacional -son 246 en todo el país-.
Entre otros índices relevantes, en cuanto a la antigüedad en la actividad enoturística se reflejó que el 65 por ciento de las bodegas se abrió al turismo en los últimos nueve años. “Esto habla de que es una actividad reciente en la región”, comentó Rodrigo González, de la UNCuyo.
También en la cantidad de visitas, se relevó que en 2013 la región había recibido 90 mil, mientras que en 2018 tuvieron 158 mil visitas. “Es casi un 80 por ciento de crecimiento en apenas cinco años. Este dato llama la atención tanto a nivel país como en Mendoza, ya que en ese mismo período crecieron en un 20 por ciento las visitas a las bodegas. Es decir, que el Valle de Uco multiplicó por cuatro ese crecimiento”, agregó González.
Otro de los puntos que se dieron a conocer, es el referido al origen del capital de estas bodegas abiertas al turismo. En un 60 por ciento son de origen mayoritariamente extranjero.