Vincent Aït-Ammar y Laura Bernard son dos estudiantes franceses que viajaron este año a Bariloche desde Grenoble para realizar proyectos de investigación universitaria en el Instituto Balseiro y en el Centro Atómico Bariloche, de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA). Ambos estudian Física e Ingeniería Nuclear en su país natal, y decidieron embarcarse en una experiencia de intercambio que los trajo a Argentina por tres meses como parte del programa binacional Argentina Francia Ingenieros Tecnología, Arfitec.
Laura Bernard, oriunda de Grenoble, está en cuarto año de Ingeniera en Física Nuclear, carrera de grado de 5 años de duración; mientras que Vincent Aït-Ammar es oriundo de Marsella, se graduó en Ciencia de la Ingeniería (Bachelor in science engineering) y ahora comienza a cursar el segundo de año de la maestría en Ingeniería Nuclear. Ambos son alumnos de la “École Nationale Supérieure de Physique, Électronique et Matériaux” (PHELMA, http://phelma.grenoble-inp.fr/) del Grenoble Institut National Polytechnique (INP, http://www.grenoble-inp.fr/).
Ante la consulta de cómo surgió la idea de realizar la estadía de investigación en el IB-CAB mediante el programa Arfitec, ambos destacaron que un profesor argentino que enseña en Grenoble la materia de Ciencias de los Reactores les contó sobre el Balseiro. Se trata de Pablo Rubiolo, egresado de la carrera de Ingeniería Nuclear del IB. En Bariloche, los coordinadores son Raúl Barrachina (director del Consejo de Institutos de CNEA) y Edmundo Lopasso (vicedirector por el Área de Ingeniería del Instituto).
Además, Laura Bernard contó que otros factores que despertaron su interés por viajar fue la posibilidad de “descubrir Argentina y su cultura, aprender español, la posibilidad trabajar en un reactor experimental y también las montañas”. Vincent Aït-Ammar comentó que en su Maestría es requisito realizar una pasantía de 10 meses entre el primer y el segundo año. Así, se contactó con docentes del Balseiro que lo invitaron a concretar un proyecto en el Centro Atómico Bariloche. “Vi también que el IB es muy famoso en Ingeniería Nuclear ya que es uno de los principales lugares en Suramérica donde se enseña esta Física”, agregó el joven.
Neutrografía en 3D. Laura Bernard, de 22 años, contó que su proyecto de investigación tuvo como herramienta principal el equipo de neutrografía que se ubica en el reactor escuela “RA-6” del Instituto Balseiro y el Centro Atómico Bariloche. “La instalación permite, de la misma manera que los rayos X pero con neutrones, sacar fotos de objetos variados y revelar su interior”, explicó la joven. Y agregó que el objetivo de su trabajo fue realizar “la primera reconstrucción en 3D de un objeto, a partir de su tomografía”. El objeto bajo estudio fue un dispositivo de seguridad que corta el suministro de gas en caso de que la llama de una cocina o calefactor se apague.
Su director en el Centro Atómico Bariloche, Julio Marín, profundizó en la definición de qué es la técnica de neutrografía. “Es un tipo de ensayo no destructivo que, en forma similar a lo que es una radiografía convencional, permite obtener una imagen de la estructura interna de un objeto”. La salvedad que destaca Marín es que en la neutrografía se utilizan neutrones en lugar de rayos X. Por lo tanto, las imágenes resultantes permiten “ver” de manera distinta e incluso a través de objetos metálicos.
Con respecto a la pasantía, el Ingeniero destacó que Bernard aprendió los conceptos básicos que hacen a la técnica de neutrografía. “Entre ellos, podría citar la física que subyace detrás de la técnica, la metodología que se aplica para obtener una imagen con neutrones, el procesamiento y análisis de las imágenes obtenidas y las características y limitaciones que tiene la instalación de neutrografía del RA-6”, detalló Marín, que es Ingeniero en Física Médica (egresado de la Universidad Favaloro) y que trabaja en Investigación y Desarrollo en el departamento Física de Reactores y Radiaciones, gerencia de Área Energía Nuclear del CAB/CNEA.
“Una vez cumplida esa etapa, trabajamos en la adquisición de tomografías con neutrones, algo que hasta el momento nunca se había hecho en Argentina”, agregó Marín, que es becario de la CNEA y que junto a su colega Fernando Sánchez están a cargo de la instalación de neutrografía del RA6 donde realizan investigaciones en ese campo. “En nuestra facilidad, aplicamos esta técnica para estudiar distintos objetos. Algunos ejemplos son: almacenadores de hidrógeno, objetos de patrimonio cultural, fósiles, componentes electrónicos, pegamentos, pinturas y rodamientos”, dijo.
Simulación de neutrones. En el caso de Vincent Aït-Ammar, su trabajo consistió en realizar una simulación alrededor de una fuente fría de neutrones. “Desde un punto de vista pedagógico, la pasantía fue muy completa porque primero me dio una buena idea de cómo los datos fundamentales de la física nuclear (secciones eficaces) son organizados en los archivos de base, y después cómo esos archivos pueden ser trasformados (generación de bibliotecas) para ser utilizados en programas específicos de simulación. Luego, usé la nueva biblioteca en un proyecto de pura simulación”, describió el joven, de 22 años.
Lo dirigió en su proyecto Florencia Cantargi, doctora en Física por el Balseiro (la licenciatura en Física la realizó en la UBA) y actual Jefa de Trabajos Prácticos de Física de neutrones, en la carrera de Ingeniería Nuclear del IB.
Cantargi, que es además investigadora de CNEA en el departamento de Física de Neutrones de la gerencia de Ingeniería Nuclear, expresó que “los objetivos de la pasantía fueron que el estudiante formara parte de un grupo de investigación y además se familiarizara con códigos de cálculo que se usan para generar datos nucleares y para diseño en ingeniería nuclear”.
El campo de trabajo de Cantargi es la generación de bibliotecas de datos nucleares (archivos que leen otros códigos de cálculo, como por ejemplo el MCNP). “Estas bibliotecas contienen información de la interacción de los neutrones con el material estudiado, por lo que para generarlas es necesario estudiar el comportamiento del material ante los neutrones. En general estudiamos materiales livianos que pueden ser utilizados como moderadores, reflectores o filtros de neutrones, entre otras cosas”, contó sobre sus tareas la joven directora del estudiante francés.
De regreso a Francia. Antes de regresar a Grenoble, Bernard y Aït-Ammar realizaron un balance sobre su experiencia en el Balseiro y el CAB. “Con respecto a la pasantía, este intercambio fue una experiencia muy rica ya que todos los investigadores nos ayudaron mucho. Todos los actores del programa Arfitec siempre estuvieron muy disponibles. Me gustó mucho la atmósfera de trabajo y eso me convenció en mi proyecto de trabajar durante mis primeros años al extranjero al fin de mis estudios. Por último, fue una experiencia humana muy fuerte, los estudiantes nos recibieron con mucho cariño, y después de tres meses en Bariloche tenemos verdaderos amigos”, dijo Vincent Aït-Ammar.
Laura Bernard también realizó un balance positivo: “Fue una experiencia genial, que pasó demasiado rápido. La pasantía fue más que interesante, me permitió descubrir un reactor experimental pero sobre todo conocer el mundo de la investigación. Lo que más me gustó fue la disponibilidad y la amabilidad de la gente”, relató. Además, dijo que le gustó compartir momentos con otros estudiantes y doctorandos de toda América Latina y de Europa. “Además, Bariloche es una ciudad rodeada por paisajes que son uno más lindo que el otro, con lagos y montañas”, agregó. También confesó que evaluará regresar al CAB-IB cuando curse una Maestría. “Me encantó el ambiente y las posibilidades para estudiar son enormes”, dijo.
Además de Bernard y Aït-Ammar, integró el grupo que realizó esta pasantía Marine Wansek. Bajo la dirección de Juan Longhino, investigador en el departamento Física de Reactores y Radiaciones, su campo de trabajo estuvo enfocado en “Terapia para el cáncer por captura neutrónica” (BNCT).
Ahora, en setiembre, es el turno de que cuatro estudiantes del Balseiro viajen a Francia. La institución anfitriona es PHELMA/INP. Permanecerán hasta febrero en ese país europeo: Marcos Tacca, Juan Ignacio Beliera, Mauricio Tano Retamales (de Ingeniería Nuclear), y Daniel Viruel (de Ingeniería Mecánica).
Sobre Arfitec. El programa “ARgentina Francia Ingenieros TECnología” (Arfitec) surge de un convenio de intercambio de estudiantes de grado de Ingeniería entre Argentina y Francia. Brinda apoyo monetario para el traslado y la estadía de los estudiantes. Fue impulsado por la firma entre ambos países de la “Carta de Intención para la Creación de un Programa Franco-Argentino de Cooperación para la Formación de Ingenieros” del 13 de julio de 2007. Uno de sus objetivos es fomentar y consolidar vínculos de cooperación durables entre las instituciones de enseñanza superior argentinas y francesas responsables de la formación de ingenieros de ambos países.
“El Programa funciona bajo el control de un Comité mixto franco-argentino de coordinación en el que se encuentran representadas las autoridades de cada país. Por la República Argentina, los ministerios de Educación y de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, y por la República Francesa, los ministerios de Asuntos Exteriores y de Educación Superior e Investigación, con el apoyo de la Embajada de Francia en la Argentina y de la Conferencia de Directores de las Escuelas Francesas de Ingenieros (CDEFI)”, informa el sitio web de Arfitec. Más información: http://www.arfitec.siu.edu.ar/