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“A un guerrillero muerto, no se lo llora, se lo reemplaza”

Aquella consigna que vistiera nuestros paredones luego de la masacre de Trelew  parece hoy retornar desde las entrañas de ese pasado. El 26 de enero murió Schafik Jorge Handál, líder y revolucionario salvadoreño. A poco más de dos meses de aquella pérdida, y luego del  triunfo en las elecciones legislativas y de alcaidías del Frente que fundó y lideró, ATPA lo recurda en esta nota.

06 de abril de 2006, 15:10.

Por Pablo Lozano

curchunflo@revistappp.com.ar

Departamento Escenarios Latinoamericanos

El pasado 26 de enero murió a los 75 años, Schafik Jorge Handál histórico líder y revolucionario del Frente Farabundo Martí de Liberción Nacional (FMLN) de El Salvador.

Schafik Handál comenzó su actividad política en 1944, con 14 años de edad, sumándose a la “huelga nacional de brazos caídos” que derrocó al sanguinario dictador Maximiliano Hernández Martínez, quien en 1931, mediante un golpe de Estado, llegó al poder deponiendo al entonces presidente Arturo Araujo y comenzando con la ola de dictaduras militares en ese país.

Tras su fallecimiento, Fidel Castro, quien fuera su amigo personal y con quien compartió las tribunas públicas en La Habana, afirmó que fue “un hombre intachable que nunca claudicó y nunca se rindió” en una improvisada conferencia frente a la Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana. El dirigente cubano agregó que “murió un gran capitán de los trabajadores, un gran dirigente revolucionario. Fue Schafik (...)Hoy todo el mundo le rinde tributo, murió con dignidad, sin claudicar, un verdadero ejemplo de revolucionario”. Por su parte el presidente de Venezuela hizo público su pesar por la pérdida del dirigente guerrillero. “Gloria a aquel gran combatiente de la libertad y la justicia” vitoreó el presidente Hugo Chávez. 

El Ministerio de Información Venezolano (MINCI) difundió un comunicado afirmando que “nos consuela su memoria, un ejemplo para las nuevas generaciones, y que Schafik Handal haya partido hacia la historia después de ver en Bolivia el ascenso al poder político de la mayoría indígena excluida y oprimida durante siglos” dado que el deceso del revolucionario salvadoreño se produjo cuando regresaba a su país luego de la toma de posesión del flamante presidente boliviano Evo Morales. El comunicado agrega: “El Pueblo y el Gobierno Bolivariano de Venezuela expresan a los compatriotas de El Salvador y de América Latina su profundo pesar por la muerte del comandante Schafik Handal, combatiente de todas las horas y héroe de la lucha por la emancipación de los oprimidos del mundo”. Partidos y dirigentes del mundo hicieron llegar su pésame.

59 Años de Lucha

Schafik Handal fue un activo militante y revolucionario. Ocupó el Secretariado General del Partido Comunista de El Salvador desde 1959 hasta 1994 cuando solicitó no ser reelecto.

En 1959 participó del diseño y surgimiento del Movimiento Revolucionario Abril y Mayo, luego devenido en Partido Revolucionario Abril y Mayo (PRAM), el cual fue ilegalizado por el Concejo Central de Elecciones, aunque había cumplimentado con todo los requisitos exigidos por la Ley Electoral de ese país.

El PRAM fue núcleo de grandes dirigentes obreros, campesinos y universitarios, luchadores por la democracia y la justicia social. Fue perseguido por el José María Lemus, lo que provocó su paso a la clandestinidad.

En 1961 otro golpe de estado instauró un nuevo régimen militar, hecho que significó el comienzo de un largo período de clandestinidad y persecución durante el que sufrió siete capturas y dos exilios. Este período de clandestinidad duró 31 años hasta el 16 de Enero de 1992 cuando se firman los acuerdos de paz, cuando participó como miembro de la Comandancia General del FMLN del que fue fundador.

En 1997 fue elegido diputado a la Asamblea legislativa, cargo en el que se desempeñó hasta su muerte este año.

Homenajeado por compañeros y enemigos de todo el mundo se despidió al Comandante Schafik Handal con los máximos honores. Fue enterrado en el camposanto Monseñor Romero, ubicado al interior del cementerio La Bermeja, por requisito de sus familiares.

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