La Universidad Nacional de Tres de Febrero iniciará este mes la inscripción para el primer año de la tecnicatura en gestión circense.
“Tengo que rendir trapecio en mayo y no me sale nada” o “Estoy recontenta porque promocioné matemática aplicada al circo” son algunas de las frases que, de ahora en más, se podrán escuchar entre los alumnos que circulen por los pasillos de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (Untref), donde se abrió la inscripción para la Tecnicatura de Gestión Circense. La iniciativa –la primera en la Argentina en otorgarle rango universitario a una carrera que sólo era práctica– empieza en marzo y tiene tres años de duración. Cuenta con materias teóricas y prácticas, y profesores que son coreógrafos, bailarines, músicos, entrenadores de gimnasia artística, actores y artistas de circo tradicional, que conocen su arte por el legado que les transmitieron sus padres o abuelos. Decenas de jóvenes ya se interesaron por la incripción que se llevará a cabo entre el 17 y el 21 de este mes.
Entre los docentes también bajarán del avión especialistas de Francia y Canadá para narrar su experiencia en la Ecole Nationale des Arts du Cirque de Rosny-Sous-Bois de París, una de las más prestigiosas del mundo. La idea se le ocurrió al rector Aníbal Jozami cuando lo invitaron a presenciar un intercambio entre alumnos franceses y argentinos que no se dedicaron sólo a hacer payasadas. El curso prevé materias prácticas y teóricas, y los chicos que quieran ingresar deberán saltar (sin eufemismos) una serie de pruebas para estudiar: no cualquiera puede caminar sobre alturas con una mujer al cuello ni bambolearse en un trapecio a cinco metros del suelo.
Las materias que necesiten el cuerpo se dictarán sobre trapecios, clavas y colchonetas del galpón de la escuela de circo El Coreto, que funciona desde 2000 en Palermo: habrá acrobacia, danza clásica y contemporánea, equilibrio, juegos teatrales, técnicas de altura y malabares. Las materias que precisen puro pensamiento se darán en un aula tradicional de la Untref e incluirán anatomía, biomecánica, historia del arte y del circo, gestión comercial de una compañía circense y matemática aplicada al circo. ¿La graduación? Será una tesis para nada convencional: un espectáculo donde los alumnos deberán crear escenografía, maquillaje, iluminación, vestuario y guión de un número de circo.
“La Argentina tuvo una tradición circense importante que en las últimas décadas decayó. En cambio, en Francia, esto ocurrió a la inversa. Por eso, nuestra propuesta pretende articular una tradición nacional que viene del siglo XIX y un aporte a la renovación conceptual que tuvo el circo en otras partes del mundo”, dice el director de Gestión del Arte y la Cultura de la Untref, Enrique Valiente, que se entusiasma con los mensajes que recibió de alumnos de distintas provincias que ya aterrizaron en Buenos Aires para inscribirse en la carrera. “Se trata de un interés que fue postergado durante mucho tiempo y que, por suerte, la Untref ahora pudo tomar”, reconoce.
En El Coreto, una de las pocas escuelas privadas dedicadas a la enseñanza de las artes circenses, los futuros alumnos de la carrera se preparan para sus pasadas. No los amedrenta el intenso calor de febrero ni las cortinas rojo fuego que caen sobre el galpón de Soler al 4600. Su directora, Gabriela Ricardes, se entusiasma: “Siempre trabajamos para que la educación en artes del circo sea pública y gratuita. Mientras más gente pueda acceder a la formación profesional, mayor va a ser la posibilidad de encontrar calidad técnica y artística. Bélgica, Canadá y Francia cuentan con más de 30 años de escuelas nacionales y públicas, por eso pensamos que para tener un circo con futuro, debemos formar artistas del futuro”.
Ana Lucía Porta tiene 25 años y lleva tres ensayando piruetas y saltos. Ahora piensa continuar su formación en la universidad. “Está buenísimo que exista una carrera universitaria y gratuita, porque si uno quiere dedicarse a esto se le va una fortuna”.
La UNCUYO fue sede del Foro Energético Nacional
22 de noviembre de 2024