Y esto es importante que lo entiendan los estudiantes, gran parte de los cuales, como dice Estévez, “fuman y son proclives al sedentarismo” (algo que nosotros ya hemos reconocido tantas veces…).

Estévez es Secretario de Asuntos Estudiantiles de la Facultad de Ciencias Médicas. Y nos cuenta sobre una novedad: desde este año, la Facultad de Medicina de la UNCuyo implementa un programa que contempla la práctica obligatoria de actividades recreativas, incluyendo el deporte. Es decir, para recibirse, los alumnos deberán utilizar no sólo su intelecto y aprobar materias; también deberán mover el cuerpo. Todo por un acuerdo con la gente de Deportes, perteneciente a la Secretaría de Bienestar Universitario.

¡Paf!

Se trata del Programa de Actividades Físicas (es decir, curiosamente: PAF). Estipula que los estudiantes de primer y segundo año realicen actividades deportivas o recreativas, como requisito para avanzar en el cursado. Se trata de seis semanas con cuatro horas cada una. Concretamente, tendrán que cursar veinticuatro horas de actividad física para poder rendir la materia Medicina: hombre y sociedad (los de primer año) o Promoción y prevención de la salud (los de segundo). Para los alumnos de tercero, cuarto y quinto año habrá salidas a la montaña.

Pero no se trata sólo de deportes. También puede optarse por actividades recreativas de integración, como dinámicas grupales o juegos cooperativos. Justamente, en la foto que acompaña esta nota se observa a los estudiantes en una de estas actividades no estrictamente deportivas.

Obligatoria

Es interesante que la idea del PAF surgió por una necesidad concreta: se halló, por una encuesta, que el 80% de los estudiantes no realizaba actividad física alguna en esa facultad. Primero se realizó un programa llamado Gimnasia Necesaria, optativo, durante 2003 y 2004. Estévez opina, en tal sentido, por qué hacer deporte o actividades recreativas ahora debe ser obligatorio:

–Antes (en 2003 y 2004) intentamos que fuera voluntario. Había siempre muy buen eco por parte de estudiantes en la primera etapa; pero las exigencias académicas hacían que pasaran a priorizar el rendimiento académico, dejando la actividad física solo en pequeño grupo.

Más allá

Estévez va más allá: afirmó que estudian la posibilidad de implementar otras actividades extra curriculares (es decir, que no se relacionan directamente con la Medicina). Por ejemplo, se incorporaría formación cultural, artística, humanidades, todo lo cual “es indispensable para formación de un médico”, sostuvo.

–¿Qué hace falta para concretarlo?
–Haría falta para esto ir viendo cómo reciben los estudiantes este tipo de iniciativas. En otros países, los estudiantes optan en un programa por alguna actividad extracurricular, en forma obligatoria. Puede ser curso de fotografía, de locución, de historia del arte o de la medicina, literatura, teatro… Que sea limitado (en tiempo), pero que saque al estudiante de estar solo metido, con las anteojeras puestas en el libro.

–Ahora bien, ¿cuál sería el objeto final de realizar estos cambios?
–Que los estudiantes entiendan al ser humano como una cosa más íntegra, que como lo que se ve en el otro extremo. Muchos médicos ven al ser humano como un conjunto de órganos, que funciona armónica o desarmónicamente. Y eso no corresponde a la realidad. Desarrollar en los estudiantes el gusto por eso, hace a una mejor comprensión de lo que es el ser humano, con el cual van a tratar tanto en salud como en enfermedad.

La próxima semana, charlaremos con estudiantes y con la coordinadora del Programa de Actividades Físicas, PAF, que funciona en Deportes de la UNCuyo.

Germán Fernández
Para ¡en contActO!, boletín de la Secretaría de Bienestar Universitario
2006