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Anuncian obras en el Clínicas

19 de diciembre de 2008, 16:02.

Según Hallú y Tedesco, habrá una inversión de 110 millones de pesos. Los profesionales denunciaron que es la segunda vez en el año que lo prometen.

La interminable crisis del Hospital de Clínicas de la Universidad de Buenos Aires (UBA) tuvo otro capítulo, esta vez protagonizado por los médicos residentes. Fue durante el acto oficial donde se anunciaba el inicio de un plan de obras para reparar el establecimiento. Un grupo de profesionales irrumpió en el salón donde se encontraba el ministro de Educación, Juan Carlos Tedesco, y el rector de la UBA, Rubén Hallú, y denunciaron el “lamentable estado de las instalaciones” y “la falta de insumos esenciales para la realización de estudios de laboratorio”.

Para las autoridades universitarias se trató de “un hecho vergonzoso que empañó un momento de felicidad para la comunidad del Clínicas”. Los manifestantes –que cortaron parcialmente la avenida Córdoba– denunciaron que “es la segunda vez que se inauguran las mismas obras en menos de un año”.

Hallú y Tedesco encabezaron el acto en el Aula Posadas de ese centro de salud, donde se puso en marcha el diseño del proyecto y la documentación técnica necesaria para el correspondiente llamado a licitación de las obras del “programa de reparación, refuncionalización y puesta en valor integral del Hospital de Clínicas ‘José de San Martín’”.

Cuando el rector de la UBA se aprestaba a brindar su discurso, un grupo de médicos residentes interrumpió al locutor y demandó ser escuchado. “Le quieren vender a la sociedad que estamos en un lugar espectacular, del Primer Mundo, y acá los pacientes se bañan con agua fría y no podemos hacer estudios básicos como un coagulograma”, dijo a Crítica de la Argentina Agustín Izaguirre, residente de clínica médica del hospital.

“Hay a quienes les duele que la universidad mejore”, respondió Hallú, y acotó que “no nos interesan aquellos que apuestan al no y lo que queremos es trabajar por la educación y para atender al paciente”. Y agregó: “Somos conscientes de que el hospital está funcionando con falencias y hay mucho por hacer todavía, pero hemos mejorado notoriamente en los últimos dos años”.

Hallú anunció que “se va a refuncionalizar todo el edificio del Clínicas, desde la terraza hasta la entrada”, y estimó que “a más tardar en septiembre del año que viene tiene que estar terminado el proyecto, para llamar a licitación de obra”.
El rector de la UBA precisó que para la puesta en marcha del proyecto “los especialistas tendrán que coordinar con los jefes de servicio cuál es el mejor modelo que se necesita”.

Cómo será la reestructuración. El programa se lanzó en el marco del convenio firmado en 2007 entre la UBA y el gobierno nacional para la realización de obras en el Hospital de Clínicas por un valor aproximado a los 110 millones de pesos y cuenta con la participación técnica de la Oficina de Servicios para Proyectos de las Naciones Unidas.

Izaguirre ejemplificó la crisis que padece el hospital: “El otro día tuvimos un paciente con pancreatitis y tuvimos que mandar a hacer los estudios, que la familia pagó de su bolsillo, al sanatorio Otamendi”, relató el profesional. “Sólo funcionan tres ascensores para 12 pisos en un hospital donde se movilizan unas 15 mil personas diarias”, acotó.

El Clínicas cuenta en la actualidad con 130 mil metros cuadrados distribuidos en 17 pisos, 400 camas de internación, y atiende 400 mil consultas médicas por año, en todas las especialidades, de pacientes provenientes de la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense, provincias del interior del país y países limítrofes.

Primero Kirchner, después Hallú

“El año pasado presentamos el acuerdo para la realización de este proyecto, suscripto por el ex presidente Néstor Kirchner, y hoy anunciamos el inicio de las obras”, debió aclarar Hallú ante las denuncias de los profesionales sobre una “doble inauguración”. Es que el 28 de mayo de 2007 Kirchner presentó en Casa de Gobierno el plan que ayer tuvo su inicio formal. “No es la primera vez que inauguran obras que nunca se hacen; en la entrada del hospital hay una plaqueta que anuncia obras para el arreglo de los ascensores y todavía usamos las escaleras”, recordó Izaguirre.

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