Un sistema basado en la utilización de una cámara de video, un software novedoso para escaneo y una impresora 3D le permitirá a un equipo de investigadores de la Facultad de Ingeniería de la UNCUYO elaborar prótesis y órtesis de manera más rápida y efectiva que los métodos tradicionales. El proyecto se realizará en conjunto con los profesionales del Centro de Rehabilitación Integral del Hospital Lencinas, ya que los principales beneficiarios serán sus pacientes.
La propuesta, que financiará durante dos años la Secretaría de Investigación, Internacionales y Posgrado de la UNCUYO, se denomina “Diseño y fabricación asistidos por computadora de ortesis y prótesis de miembro inferior” y busca mejorar la calidad de vida de quienes requieren estos elementos. Además, apuntará a que se desarrolle un software de uso libre, para utilizar en esta como en otras instituciones dedicadas a la salud.
Entre otros puntos el proyecto destaca la colaboración mutua entre la Universidad y el hospital Lencinas, por lo radical que se vuelve para el servicio el asesoramiento desde un punto de vista médico y el vínculo fundamental con cada paciente. Además de ser aplicada a casos reales, será la primera experiencia de este tipo que se realiza en una institución pública de la provincia.
“Lo destacable de este proyecto es que es interdisciplinario. Esto genera riquezas porque hay aportes de distintas áreas y campos. En este caso, nosotros nos encargaremos del diseño y el proceso de construcción del elemento y el Servicio de Rehabilitación del hospital aportará médicos, kinesiólogos y protesistas, pero también los pacientes que es la fuente del problema que buscaremos resolver”, comentó Oscar Curadelli, Secretario de Ciencia Tecnología y Posgrado de la Facultad de Ingeniería y director de la investigación. En la iniciativa también participa la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales, que contribuirá con computación de alto rendimiento.
Tecnología de avanzada
El proyecto tiene como premisa acelerar el proceso de fabricación de prótesis (extensión artificial que reemplaza una parte del cuerpo que no existe) y órtesis (apoyo u otro dispositivo externo que sirve como tutor o corrector) a través de la incorporación del escaneo asistido por computadora, el diseño y su posterior fabricación a través de la impresión 3D.
De este modo, se mejoraría el rendimiento de los procedimientos tradicionales, que resultan complejos y lentos ya que requieren de habilidades específicas para su elaboración, relacionadas no sólo con lo biomédico sino también con lo artístico.
En detalle, el escaneo consistirá en relevar la geometría del miembro del paciente al que se le debe adaptar una prótesis u órtesis. Luego, a partir de la geometría relevada a través de una cámara de video y un software creado específicamente para el proyecto, se fabricará el elemento con la impresora 3D. “Esto significa que al incorporar estas tecnologías se genera un producto más personalizado al paciente, que requiere menos interacción entre este y el especialista médico y, por ende, disminuye el tiempo de fabricación, posibles correcciones funcionales posteriores o molestias durante su utilización”, explicaron desde la UNCUYO.
Con respecto a la importancia del software, que se encuentra actualmente en período de prueba y mejora, Hernán Garrido, codirector del proyecto, agregó: “es necesario por dos razones, los que están en el mercado son caros para nuestros presupuestos y, por otro lado, necesitamos de un software específico que satisfaga nuestras necesidades. Es necesario que copie todos los detalles del miembro del paciente para lograr reproducir la órtesis o prótesis y que se adapte perfectamente a las características del paciente. Se está realizando bajo la plataforma Matlab, pero en un futuro se transferirá a software de uso libre”.
Más allá de que el proyecto está planteado para realizarse en dos años, los investigadores de la Facultad de Ingeniería apuntan a que el sistema después continúe sin depender de la Universidad. “La idea es que podamos transmitirlo todo. Tanto los conocimientos como también el hardware, la impresora, el escáner y que lo manejen directamente desde el Hospital Lencinas”, agregó Curadelli, que también dejó abierta la posibilidad de que, después, puedan seguir estudiando cómo perfeccionar aún más la tecnología que utilizarán.