Por Soledad Gil
Departamento de Movimientos Sociales
17/04/06 Las bibliotecas populares no solo constituyen un gran movimiento social en nuestra provincia sino también en todo el país.
Estas instituciones son autónomas, creadas por los vecinos de una localidad o barrio y sostenidas por los socios. Son espacios educativo-culturales cuyas características son la libertad, el pluralismo y la apertura. Persiguen el fin de brindar información, recreación, educación y contención social. En el país hay más de 1.970 bibliotecas.
Según sostuvo María del Carmen Bianchi, presidenta de la Comisión Nacional de Bibliotecas Populares (CoNaBip) en declaraciones a diario Los Andes, son aproximadamente 27.000 personas las que trabajan voluntariamente en las distintas bibliotecas de Argentina.
La importancia social que revisten estas instituciones no gubernamentales, se deja ver en cada una de las actividades que realizan ya que no sólo prestan libros a los socios, también realizan diversas actividades culturales como talleres, exposiciones, concursos literarios y capacitación laboral, entres otras.
Desde la biblioteca popular "Juventud en Acción", contaron a ATPA que "tenemos un trabajo extra-bibliotecario. Se dictan talleres de danza, pintura, karate, entre otros." Además, trabajan en conjunto con las escuelas cercanas.
Rosa Ruiz, de la biblioteca "Juan Bautista Alberdi", de Luján de Cuyo y vocal de la Comisión Provincial Protectora de Bibliotecas Populares, en declaraciones a ATPA expresó que "las bibliotecas populares captan todo el segmento de estudiantes. La función social que cumplen es ser nutrientes básicos de la educación, la difusión de la literatura y de las expresiones culturales de la propia comunidad." Apuntan también a contención de los jóvenes en riesgo y de los ancianos.
El tema de los subsidios
En nuestro país existe la Comisión Nacional de Bibliotecas populares (CoNaBip) basada en la ley 23.351. En Mendoza, funciona en el Ministerio de Turismo y Cultura la Comisión Provincial Protectora de Bibliotecas Populares (CoProBip).
Ambas comisiones buscan proteger y fomentar, a través de subsidios, el crecimiento y mantenimiento de los establecimientos. También, se creó la Federación de Bibliotecas Populares, integrada por personas que trabajan en ellas.
Según informaron desde la Comisión Provincial, para poder acceder a los subsidios que otorga el gobierno, tanto nacionales como provinciales, las bibliotecas deben cumplir con ciertos requisitos indispensables.
Las bibliotecas populares, nacen del esfuerzo de una comunidad. Son llevadas adelante a pulmón, por el compromiso voluntario de sus integrantes y varias no llegan a cumplir con los requisitos exigidos por la Ley Provincial de Bibliotecas Populares, nº 6971. Al no contar con recursos, tienen que cerrar, dejando a toda una comunidad sin la posibilidad de compartir un espacio, crear, integrase, conocer y trabajar.
Según diario Los Andes, el 3 de abril CoProBip y CoNaBip entregaron 248.000 pesos que fueron distribuidos entre 51 bibliotecas, de las más de 80 que existen en Mendoza. En el acontecimiento, estuvo presente la presidenta de CoNaBip, María del Carmen Bianchi, quien visitó distintos establecimientos.
Los fondos son destinados a la compra de nuevos libros pero también, en muchos casos, a la refacción de los edificios.
Bianchi rescató el trabajo voluntario de las sedes pero criticó la falta de apoyo de los municipios no sólo en lo económico, sino también en lo político. Además, dijo que "el desafío actual es cómo hacemos para que las bibliotecas puedan resistir el imperio del siglo XXI, el avance tecnológico (…) nosotros como organismo del Estado hemos puesto el esfuerzo en acompañarlas para adecuarse a las demandas de los usuarios".