Ampliar el acceso a la educación, brindar flexibilidad a los estudiantes y prepararlos para un mundo laboral digitalizado y cambiante es lo que se propone la Universidad Nacional de Cuyo. Para ello trabaja en el proyecto Desarrollo de niveles crecientes de virtualidad en las carreras presenciales y planes de estudio de carreras de pregrado y grado a distancia.
Según la normativa actual, los grados de virtualidad alcanzan un 30% en la mayor parte de las carreras. En ese sentido se busca impulsar una política académica que promueva la ampliación y diversificación de las propuestas educativas con niveles crecientes de virtualidad, multimodalidad y modalidad a distancia de pregrado y grado. Así el proyecto tiene como fin promover una integración presencial/virtual que aproveche las posibilidades de las tecnologías digitales con el objetivo irrenunciable de garantizar una educación superior de calidad, inclusiva, accesible e innovadora.
Se prevé que en 2024 la UNCUYO avance en la virtualización del 50% de la carga horaria en planes de estudio de carreras presenciales y que algunas alcancen el 100% desarrollándose a distancia.
Compromiso académico
Fabiana Molina, Secretaria Académica y Mariela Meljin, Directora de Educación a Distancia de Rectorado, se reunieron con las autoridades y equipos de Educación a Distancia de diferentes facultades e institutos para compartir el proyecto. También para profundizar, entre otros temas, el estado de situación actual de la virtualidad de cada unidad académica, la relevancia del trabajo en equipo de las áreas y la intencionalidad de las autoridades de avanzar de manera sostenida en procesos que pongan en valor la propuesta pedagógica, ya sea de las tecnicaturas, profesorados o licenciaturas, atendiendo a las características de la población estudiantil, territorios, formación y disposición docente.
Ya se reunieron con miembros de las Facultades de Filosofía y Letras, Ciencias Económicas, Ciencias Exactas y Naturales, Ciencias Políticas y Sociales, Educación, Ciencias Médicas, Odontología y con el Instituto Tecnológico Universitario. En abril continuarán con las unidades académicas restantes.
El proyecto
El proceso se realizará a partir del diseño, implementación y evaluación de un dispositivo de acompañamiento HUB. Se plantea como un punto de encuentro híbrido que facilita el intercambio, la formación tecnopedagógica e impulsa practicas educativas innovadoras.
Se desarrollará en tres niveles:
- Nivel 1: Fortalecimiento de las unidades académicas para integrar complementos virtuales hasta el 30% de la carga horaria total de sus planes de estudio de carreras presenciales.
- Nivel 2: Incentivo y apoyo en el desarrollo de propuestas que incluyan hasta el 50% de virtualidad (o no presencialidad) en la carga horaria total de sus planes de estudio de carreras presenciales.
- Nivel 3: Acompañamiento en la formulación de planes de estudios de carreras de pregrado y grado seleccionados para implementar carreras a distancia.
Etapas del proyecto
- Relevamiento: en el que se realizará un mapeo del estado de situación de cada unidad académica en relación a la virtualidad, se evaluarán antecedentes, experiencias previas, planes de estudio, normativas, equipos de educación a distancia, formación docente, tecnologías disponibles, etc.
- Sensibilización: cada proyecto se trabajará mediante consensos y acuerdos con las autoridades académicas y referentes de educación a distancia. Por lo cual, la propuesta surgirá de las necesidades, prioridades y decisión político-académica de cada unidad académica o instituto.
- Implementación del HUB: mediante un acompañamiento integral y graduado por parte del equipo de la Dirección de Educación a Distancia.
- Evaluación: Elaboración de instrumentos de medición, indicadores de avance y reuniones in situ.
Innovación educativa
Fabiana Molina explica que en la actualidad la virtualización de las carreras es importante porque permite el acceso a la educación a personas que de otra manera no podrían debido a limitaciones geográficas, laborales o personales. "Esto democratiza el acceso a la educación y permite que un mayor número de personas pueda obtener formación académica".
La flexibilidad es otro punto clave porque permite a los estudiantes adaptar sus horarios de estudio a sus responsabilidades laborales, familiares u otros compromisos. "Esto resulta especialmente relevante en un mundo cada vez más dinámico y cambiante, donde la conciliación entre el trabajo, el estudio y la vida personal es fundamental", argumenta la funcionaria.
Otro eje es el desarrollo de competencias digitales en los estudiantes ya que los prepara para un entorno laboral en constante evolución donde el dominio de herramientas digitales y la adaptación a ellas es cada vez más valorado.
"Abrir la posibilidad de aumentar la virtualización de las carreras es importante en la actualidad para ampliar el acceso a la educación, brindar flexibilidad a los estudiantes y prepararlos para un mundo laboral digitalizado y cambiante", sintetiza Molina.