Hablamos, nada mas y nada menos, que de esos entrañables personajes que supieron hacer las delicias de quienes fueron infantes o ya adolescentes, a fines de los ‘80: The Garbage Pailkids, algo así como los pibes del tarro de la basura. Recordemos que en nuestro país estas figuritas se conocieron como “Basuritas” y con los nombres de los personajes adaptados a nuestra configuración regional- cultural.

Un poco de historia basura “The Garbage Pailkids, la película” se basa directamente en los dibujos que en 1985 creara John Pound, dibujante de la empresa de golosinas Topps.

Pound a partir de una irónica broma delineó un simpático dibujo que gustó mucho a los directivos de la empresa: el escarnio estaba dirigido de manera directa, a una serie de muñecas llamadas Cabbage Patch Kids, que representaban a la típica niña modelo americana. Este dibujo se llamó, "My First Garbage Pail Kids" (Mi primer chico del cubo de la basura), mientras que el producto original, "My First Cabbage Patch Kids" (Mi primer chico del repollo) hacía referencia a la forma en la que nacían los muñecos.

A partir de este dibujo, Topps pidió a John Pound y a otros 3 dibujantes crear una serie basada en aquel primer dibujo. Pound muy entusiasmado con el proyecto creó un montón de diseños e ideas. Sólo entre 1986 y 1989 salieron las 15 colecciones que completan el set de Garbage Pail Kids: unas 622 figuritas, con una popularidad abrumadora entre los escolares y una impopularidad escandalosa entre los padres.

Cine del tacho de la basura

Existen innumerables rumores alrededor de esta película que en la escena bizarra se conoce como “de culto”. Lo cierto es que al momento de su lanzamiento fue tremendamente impopular y solo estuvo en cartelera por muy poco tiempo pasando rápidamente al video, lo cual la convierte en una especie de “gema” para los coleccionistas “freakys”.

Se comenta que los actores que caracterizaron a los siete “chicos del cubo de la basura” elegidos, fueron algunos actores enanos que hicieron las veces de “ewoks” en “El retorno del Jedi” y otros personajes como el “pinguino emperador” en “Batman’s return” o el bebé Sasquatch de “Pie grande y los Henderson”. Adorable, ¿no?. Bien, corrillos y complicidades aparte, lo cierto es que este film posee algunos puntos de interés para cinéfilos, por lo menos como curiosidad: los fanáticos aseveran que es tan, pero tan mala en todos sus niveles que eso la convierte en “imprescindible”. Fue dirigida y producida por Rodney Amateu, quien dirigió otras películas tan deformes como las Basuritas, pero olvidables, entre ellas “USA High School”. También dirigió portentos televisivos como los “Dukes of Hazzard” (1979-1985), la emblemática “Mr. Ed” y “La Isla de Gilligan”.

Por otra parte, la historia y la estética del filme pueden deleitar enormemente a los amantes de la clase B: la peli propone una historia básica pero efectiva, donde un adolescente típicamente americano (Mackenzie Astin como Dodger) se enamora de una chica mayor pero típicamente mala (Tangerine), quien pertenece a una típica pandilla de chicos malos. La chica mala utiliza a los basuritas y descorazona al rubio adolescente para que finalmente los mismos “basuritas” concreten una asquerosa y olorosa venganza. El vestuario típico de los plásticos ochenta, la recurrente caída en lugares comunes, el origen alienígena de los personajes (!), sumado a una serie de recursos propios de las producciones de bajo presupuesto americanas, termina de redondear un producto, por lo menos, curioso.

Un párrafo aparte merecen los personajes “basuritas” elegidos para este film. La mayoría de los personajes de GPK en figuritas tenían una personalidad realmente asquerosa o por lo menos un rasgo de la misma que rozaba lo escatológico. Cada “cromo” presentaba a un niño gustoso de cometer diversas groserías, ofensas y humillaciones que terminaban de completar un extenso catalogo de ignominias. Luego, su nombre rimaba ,en el caso de Argentina, complementando el depravado producto como “Batidora Isidora”, una niña que batía su propia cabeza.

En GPK “the movie” esto se hace patente y los elegidos tal vez, sean los mas asquerosos de la gran familia basura: “Ali Gator” o un cocodrilo que no se despega de una pequeña caja de metal donde guarda celosamente dedos, bolas de ojos y tobillos que luego comerá con fruición. Sigue “Windy Winston” o la “ventosa” Winston que nos deleita con flatos varios y sonoras ventosidades por doquier: es todo lo que hace en la película. Valerie Vomit es otra de las encantadoras niñas de la basura y una de las figuras más tradicionales de la colección. Ya se imaginarán como decora los escenarios.

“Messy Tessie” es quien se encarga de picarse de manera permanente la nariz y realizar varios actos con su mucosidad como arreglar un televisor. Uno de los personajes más pintorescos se encuentra en “Nat Nerd”, un niño con muchísimo acné, ataviado en un ridículo trajecillo de superhéroe, quien no para de orinarse encima; sobre todo en la situaciones mas comprometedoras. Finalmente, se presentan “Greg Greaser” un horrible rockero de los ’50 que debe su nombre a la grasitud del pelo y “Foul Phil”, un pequeño bebé que no habla pero es lo suficientemente desagradable.

Toda esta pandilla se encargará de pergeñar innumerables gags, pero también de dejar un panfleto final para el aturdido público: no es bueno separar o discriminar a quienes son realmente diferentes. Otra: el afiche vende la peli como “GPK ‘the movie’, fuera del cubo y dentro de tu corazón”. Para una noche de lobotomía y mucha cerveza.