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Clarín: Argentinos analizan el genoma blanco

Científicos argentinos estudiarán el ADN de bacterias que viven en la Antártida bajo las más crudas temperaturas: los resultados sobre el genoma blanco pueden aportar soluciones a problemas de la salud y ambientales.

31 de mayo de 2006, 14:07.

Para la ciencia es más que útil saber cómo tales micro-organismos hicieron una reingeniería de su estructura genética. Para no morir de frío pasaron por una compleja gama de adaptaciones en sus células y sus mecanismos de alimentación y de biosíntesis.
 
"Por ejemplo, será útil conocer su capacidad de degradar y volver inocuos los contaminantes derivados del petróleo", explicó a Clarín el científico Walter Mac Cormack, del Instituto Antártico Argentino. Será la primera investigación argentina de este tipo.
 
El Instituto —cuyo Grupo Microbiológico dirige Mac Cormack y depende de la Dirección Nacional del Antártico— ayer firmó un acuerdo de cooperación con la empresa de biotecnología Bio Sidus. El canciller Jorge Taiana presidió el lanzamiento de "Genoma Blanco", en el Palacio San Martín, junto al presidente de Bio Sidus, Marcelo Argüelles; el director de esa firma, Marcelo Criscuolo; y los titulares de la Dirección del Antártico, Mariano Memolli; y del Instituto Antártico Argentino, Sergio Marenssi.
 
La meta es hallar y aislar micro-organismos triunfantes frente al reto ambiental de soportar bajísimas temperaturas bajo cero, adaptando su "máquina" bioquímica. La investigación apuntará a la microflora compuesta por las bacterias llamada psicrófilas o criófilas, que lograron sobrevivir con temperaturas de entre 5 grados bajo cero y 5 grados.
 
"Conocer el genoma de una bacteria —dijo Mac Cormack— ayudará a saber cómo se adaptó a vivir a bajas temperaturas". Agregó que las enzimas son "las herramientas con que las bacterias viven y metabolizan". Agregó que se investigan los lípidos "como vehículos de drogas de aplicación en seres humanos; y los lípidos de las bacterias criófilas (adaptadas al frío) serían útiles para desarrollarlas como vehículo de drogas en el cuerpo humano".
Patricio Downes pdownes@clarin.com  

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