Los jueces tuvieron en cuenta el dictamen de los peritos y el aporte de testigos. El tribunal consideró que el paso del grupo por una ruta equivocada produjo una sobrecarga que ocasionó el corte de una placa de nieve. Ese corte, según entendió el tribunal, generó la avalancha que envolvió a los estudiantes. El accidente ocurrió el 1º de setiembre de 2002 en una montaña ubicada al sur del casco urbano de la ciudad. En el alud murieron Paolo Machello, Adrián Mercado, Oscar Vaccari, Mario Tapia, Antonio Díaz, Gimena López, Gimena Padín, Martín Lemos y Roberto Montero.
Ese día se desarrollaba una práctica del profesorado de Educación Física con orientación en montañismo, una carrera que dicta la Universidad del Comahue. Lamuniere, integrante de una conocida familia de montañistas de Bariloche, era docente y lideraba un grupo de guías. El también fue arrastrado por el alud.
La defensa había pedido la absolución del guía al considerar que no se había probado en forma fehaciente que el paso del grupo sobre la nieve hubiera sido lo que produjo la avalancha.
Por un lado habían cuestionado que la deliberación de los peritos no hubiera sido secreta porque fue presenciada por un gendarme idóneo en montañismo enviado por el juez federal. Y también habían destacado las contradicciones en las que incurrieron los peritos, que no lograron ponerse de acuerdo respecto de cuántas avalanchas se habían registrado al momento del accidente, cuáles habrían sido provocadas por el paso de los estudiantes y cuáles se habrían generado en forma espontánea.
Los defensores de Lamuniere también habían apuntado a la Universidad del Comahue, al entender que sus autoridades eran los principales responsables de que se hubiera organizado esa salida a la montaña.