Lograr un espacio que acerque a la universidad con el mundo empresario, para que los estudiantes encuentren posibilidades de trabajo y las empresas se acerquen a un universo importante de candidatos, es un eslabón esencial del mercado laboral. En esto se basan las "Jornadas Trabajo" organizadas por Worktec desde 2003.
Este año, los encuentros arrancaron con trabajo IT, el 3 de mayo. El próximo 31 será el turno de la segunda edición de "Trabajo Económicas" y para el 13 de julio está programada la jornada de ingeniería.
Coorganizada con la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires, su Centro de Estudiantes y Universo Laboral, la jornada de económicas se hará en el hotel Sheraton de 9 a 20. "Nuestra prioridad es que los chicos se lleven la posibilidad de ser entrevistados y si no lo son, de saber cómo lograrlo durante sus estudios", explica Martín González Parra, socio de Worktec, quien espera superar las 7000 personas que asistieron el año pasado.
Durante el encuentro, se realizan charlas en las que, por ejemplo, se analizan las perspectivas de desarrollo de carrera, los ciclos vitales: familia-carrera, el correcto armado de un curriculm vitae (CV) o las remuneraciones de cada sector. "La actividad es gratuita para los estudiantes y a las empresas les sirve porque pueden armar una buena base de datos de CVs", detallan en Worktec.
Emiliano Yacobiti, secretario de Bienestar Estudiantil de la UBA, explica que "dada la masiva concurrencia del año anterior, queremos brindar el apoyo al Centro de Estudiantes para que los docentes de la casa sean los principales capacitadores del encuentro y puedan contar sus experiencias personales en lo relacionado con la carrera laboral".
Según un relevamiento de Worktec pasados 3 meses de la jornada realizada en 2005, las firmas participantes habían entrevistado a más de 1500 personas. Algunas de las empresas que estarán en este edición son KPMG, Cargill, Banco Supervielle, Adecco, Ernst & Young, EDS, BDO Becher y Carrefour.
Carlos López, director de Relaciones Institucionales del Rectorado de la Universidad Tecnológica Nacional, una de las organizadoras de la Jornada Trabajo IT (tecnología informática) que se realizó el pasado 3 de mayo, cree útiles este tipo de encuentros porque "brindan a los estudiantes información actualizada acerca de los mecanismos de postulación, selección e inserción, remuneraciones y modalidades de trabajo, capacitación y competencias más demandadas".
Tanto González Parra como López coinciden en que "falta gente" en el mercado de la informática, aproximadamente unos 25.000 profesionales, y que el desafío es no solo que los estu diantes empiecen la carrera sino que la terminen. "Estudiá, no te quedes solamente con el trabajo porque esto es una circunstancia del mercado de hoy. El diploma es necesario para un desarrollo profesional" es el mensaje de Worktec y la UTN. Según López, a partir del segundo o tercer año de la carrera los alumnos ya pueden estar trabajando y agrega: "durante los próximos años nuestros egresados poseerán una adecuada inserción en el aparato productivo nacional e internacional".
Otro asignatura es achicar la brecha entre la formación provista por la universidad y lo que piden luego las empresas. "Todavía hay una gran diferencia. Los chicos salen de la facultad sin el conocimiento necesario para insertarse en el mercado laboral de la informática. Esto es algo que también expusimos y para lo cual buscamos soluciones durante nuestra jornadas" , concluye González Parra.
Para recibir información general acerca de estas jornadas, los interesados pueden escribir al mail info@worktec.com.ar o acceder a la página www.worktec.com.ar
Carol Abousleiman.
OPINION
Las pasantías en estudios jurídicos
Existe un antiguo verbo inglés ("to article") para describir la actividad del joven estudiante de derecho que, a cambio de ser entrenado en la práctica profesional por un abogado, presta servicios en su estudio. Ese verbo reconoce un origen común con la palabra "articulación": ambos términos derivan de "brazo". Se entendía así que el pasante era, de alguna manera, una extensión de su maestro.
El trabajo del pasante se realizaba, en los viejos despachos ingleses, en una misma mesa, sentado codo a codo con el abogado que oficiaba de maestro. El joven alumno leía, por sobre el hombro, lo que su tutor escribía; en ocasiones, era él quien sometía sus escritos al abogado veterano, quien impiadosamente corregía cualquier error o señalaba todo salto lógico en los razonamientos del aprendiz.
El valor de la pasantía está dado por la proximidad que el pasante tenga con tareas que le permitan aprender y adquirir las destrezas de la profesión, para así "redondear" los conocimientos teóricos adquiridos en la universidad. En ciertos países, los alumnos de derecho trabajan durante sus vacaciones asistiendo como pasantes a algún juez. Esta cultura del trabajo formativo durante las vacaciones es casi inexistente en la Argentina, y priva a los futuros abogados de la posibilidad de llevar a cabo una tarea de probada eficacia educativa.
En la Argentina existe una Ley de Pasantías que exige que se cumplan muchas de las condiciones que rodeaban las viejas pasantías inglesas, como la existencia de un real tutor, la enseñanza de verdaderas destrezas profesionales, etc. Sin embargo, por lo general se la desnaturaliza, para encubrir una verdadera relación de empleo. En muchos casos, se adjudican a los pasantes tareas que no agregan nada a su profesión, o que están limitadas a las de un simple cadete.
Es necesario reformular la ley de pasantías y eliminar las prácticas viciosas que, por desgracia para quienes necesitan de la norma, han surgido a su sombra.
Juan Javier Negri. ESTUDIO NEGRI & TEIJEIRO
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