Mientras los decanos buscan una salida al conflicto por las elecciones en la Universidad de Buenos Aires (UBA), el ministro del Interior, Aníbal Fernández, afirmó que el Gobierno espera que la institución educativa pida intervención para, recién ahí, poder actuar.
 
En este sentido, Fernández -en declaraciones radiales- dijo que “me tiene que decir la institución para que yo pueda judicializarlo (al tema) y tener la autorización judicial para entrar”.
 
Luego, agregó que “si no hay una acción de la universidad, lo he hablado con el profesor (el actual rector de la UBA, Guillermo) Jaim Etcheverry tres veces, nosotros miramos el tema y esperamos que tengamos que actuar en el momento oportuno”. Pero reconoció que “no se nos ha pedido ni se ha judicializado, ni tenemos instrucciones judiciales para poder actuar”.
 
En tanto, los trece decanos de las facultades de la UBA, junto con el actual rector y candidato a revalidar su puesto, Jaim Etcheverry, se reunirán esta mañana en la sede de Ciencias Económicas para “conversar sobre la gobernabilidad de la UBA”, un día después de que se frustrase por tercera vez la elección del nuevo rector por la toma del colegio Nacional Buenos Aires. Mientras tanto, los candidatos muestran posturas diferentes.
 
El encuentro será a puertas cerradas. El decano de Sociales, Federico Schuster, lo explicó ayer más crudamente: "Tenemos una responsabilidad. Y gran inquietud ante un escenario de posible quiebre institucional".
 
Ayer, la toma del Nacional Buenos Aires por estudiantes de la Federación Universitaria porteña (FUBA) consiguió su objetivo: un tercer fracaso de la elección que deja otra vez a la universidad sin rector para los próximos 4 años.
 
La conducción de la FUBA repitió así una estrategia destinada a minar la candidatura a rector del decano de Derecho, Atilio Alterini, quien hasta ayer contaba con las mayores chances de ganar. Los estudiantes acusan a Alterini de haber participado en la vida académica durante la última dictadura.
 
La situación provoca también diversas opiniones entre los candidatos a rector. El ingeniero y ex decano de Agronomía Fernando Vilella acusó por la suspensión a “un grupo pequeño que no quiere discutir”.
 
“Me parece que hay que sentarnos todos en la mesa: decanos, la FUBA, candidatos. Todo esto nos apena, es un espectáculo bochornoso. Me parece que todos deberíamos haber ayudado al control de los hechos”, planteó esta mañana en declaraciones radiales.
 
Por su parte, Alberto Kornblihtt, un investigador del Conicet cuya postulación fue promovida por decanos y consejeros de centroizquierda., se mostró más cerca de los estudiantes que tomaron el Nacional Buenos Aires: “Creo que la manifestación estudiantil es legítima, lo que no avalo es que traigan a la barra brava de Chacarita, como el otro día, gente que yo creo es del sector de Alterini”, acusó.