Presidido por Santiago Gima (PO) y Agustín Vanella (MST), el Frente intenta reeditar el tradicional discurso del movimiento universitario de los 70. Convencidos de que la Universidad no puede ser más una isla y de que sus problemas no se arreglan de las puertas para adentro, los dirigentes de la FUBA buscan acción en unidad con otros sectores populares. Otro de los ejes de su plan político procura liderar la "lucha estudiantil" en alianza con los centros de estudiantes de las escuelas secundarias.

Voces de sus dirigentes que prefirieron el anonimato:

"Sostendremos la unidad estudiantil con las luchas populares".

"Se va a reabrir la crisis nacional y tendrá repercusión en la universidad donde impulsaremos una fuerte movilización. El ataque del Gobierno a los piqueteros duros es también un ataque hacia nosotros".

Aunque desde su creación el Frente sufrió cambios, nunca perdió su perfil de izquierda dura. Y en estos años, los sectores de centroizquierda no lograron construir una coalición para pelearles el poder. Esta FUBA no reniega del apodo "piquetera" que sus propios dirigentes alentaron allá por 2001.