Desde Potrero de Garay, un pueblo cordobés ubicado a 80 kilómetros de la capital provincial, el presidente Néstor Kirchner anunció que este año se aprobará la nueva Ley de Educación.
 
El Presidente, en un claro gesto de apoyo al gobernador cordobés José Manuel de la Sota, eligió la inauguración de una escuela para dar inicio al ciclo lectivo a nivel nacional, pese a que en Córdoba las clases comienzan el próximo miércoles 1º de marzo para el nivel primario y el lunes 6 de marzo para el nivel medio.
 
Acompañado por el ministro de Educación, Daniel Filmus; el ministro de Planificación, Julio De Vido, y la vicepresidenta de la Cámara de Diputados, Patricia Vaca Narvaja, Kirchner desembarcó en Córdoba para decir que "los argentinos estamos en condiciones de discutir la Ley de Educación y esperamos poder sancionarla este año con claridad, con consenso, con diversidad, con toda la capacidad que tenemos los argentinos para encontrar una síntesis superadora que pueda contener la verdad relativa de cada uno de nosotros".
 
Cerca de 2.000 personas, principalmente alumnos de escuelas de la zona, se reunieron para ver al Presidente, pero por el frío y la llovizna el acto de inauguración de esta escuela se realizó bajo techo y la mayoría de la gente quedó afuera.
 
El PJ movió gran parte de la concurrencia, aunque también se vieron pancartas de los piqueteros de Barrios de Pie y del Frente Nuevo de Luis Juez.
 
En su discurso, el Presidente se refirió a De la Sota como "querido José Manuel", en un claro guiño hacia el gobernador.
 
Clarín le preguntó a Kirchner si la concurrencia a este acto era un apoyo a De la Sota y una advertencia al intendente cordobés porque sus cinco diputados nacionales votaron contra el proyecto oficialista de modificación del Consejo de la Magistratura, pero lo negó: "Yo sólo vine a compartir la inauguración de una escuela", dijo.
 
Sin embargo, no había ningún funcionario juecista en el palco oficial. Sí estuvo entre el público el secretario de Salud municipal, Raúl Jiménez.
 
Kirchner dijo además que "por primera vez en el año escolar, no habrá ningún docente bajo la línea de pobreza. Es un punto central y fundamental", en clara referencia al anuncio de que el salario mínimo para los maestros será de 840 pesos.
 
De la Sota, por su parte, afirmó que "con el Presidente coincidimos en que la educación es el nuevo nombre de la justicia social en el mundo, en este mundo del conocimiento donde sólo la educación posibilita el ascenso social de los más postergados".
 
Daniel Filmus, antes, les había dicho a los docentes que "mantengan la utopía" y a los padres les pidió que "participen para educar a los chicos, porque con la escuela sóla, no basta".
 
En el acto, las autoridades nacionales también anunciaron partidas para la autopista que unirá Córdoba con Rosario y otras obras públicas.
CORDOBA . CORRESPONSALIA