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Clarín: Ingeniería: repusieron al decano otra vez en su cargo

El rector de la UBA suspendió ayer "ad referendum" la segunda destitución.

El rector de la Universidad de Buenos Aires, Guillermo Jaim Etcheverry, suspendió ayer "ad referendum" del Consejo Superior, la segunda destitución del decano de la Facultad de Ingeniería, Bruno Cernuschi Frías. Esta medida la había tomado anteayer el Consejo Directivo de Ingeniería.

La medida del rector supone que el Consejo Superior deberá tratar el tema en una próxima reunión, el 16 de marzo. Y allí ratificar la decisión o enviar el caso a comisión.

El paso adelante de Jaim Etcheverry, dispuesto por resolución Nº 102, se basó en una norma jurídica que el despacho original de la Comisión de Interpretación y Reglamento de la Facultad de Ingeniería ya había desatendido: el descargo de las pruebas de defensa del decano. Una falta importante, por cuanto fue sobre dicho despacho que el Consejo Directivo de Ingeniería basó la primera destitución de Cernuschi Frías, a fines de marzo de 2004. Decisión que, además, ya había sido suspendida por los 16 consejeros superiores, que el 23 de junio del año pasado lo restituyeron en su cargo.

Sobre la falta de defensa del decano, la resolución Nº 102 de ayer observa que "contradice elementales procedimientos de derecho jurídico". Y, más adelante, Jaim Etcheverry deja constancia de que en su carácter de presidente del Consejo Superior puede tomar estas atribuciones porque fue ese cuerpo el que instó al Consejo Directivo de Ingeniería a dar lugar al decano a hacer su descargo y producir su prueba.

Sobre la solución —aún parcial— del rector de la UBA, la agrupación estudiantil El Gradiente, contraria a la reposición del decano, manifestó: "Jaim Etcheverry ha demostrado un absoluto desprecio por la democracia universitaria y sus instituciones".

Pero desde la defensa del decanato de Cernuschi Frías, uno de los representantes del Claustro de Estudiantes del Consejo Superior, Agustín Vanella, esgrimió: "No puede ser que las casi 10 mil personas de la Facultad de Ingeniería seamos rehenes de 11 consejeros directivos que se reúnen a puertas cerradas, fuera del período de sesiones ordinarias, para hacer lo que se les da la gana y llegar a los límites de violar procedimientos que ellos mismos dicen defender".

A la hora de buscar la punta del ovillo de esta historia de idas y vueltas, inédita en los 183 años de la UBA, se mencionan los informes que a mediados de 2003 Cernuschi Frías elevó al Rectorado. Los mismos revelaban "rarezas" en contrataciones y pagos realizados por la extinta Fundación Facultad de Ingeniería. Rectorado los envío a la Oficina Anticorrupción (OA), que a fines de 2003, ante la sospecha de delito, elevó el informe a la Justicia. Cernuschi Frías todavía nunca fue citado a declarar.

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