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Clarín-Jueves 24: Por segunda vez en menos de un año, destituyen al decano de Ingeniería

Ya lo habían hecho en marzo de 2004. Pero el Consejo Superior lo volvió a nombrar.

Por segunda vez en menos de un año, el Consejo Directivo de la Facultad de Ingeniería de la UBA, destituyó al ingeniero electromecánico Bruno Cernuschi Frías, decano hasta ayer de esa casa de altos estudios. Su reemplazo, por orden natural, correspondió al vicedecano, Francisco Grasso.

El por segunda vez ex decano, había sido destituido a fines de marzo de 2004 por el mismo Consejo Directivo que ayer lo expulsó; pero por razones distintas a las que ayer se argumentaron. Meses después el Consejo Superior de la UBA lo restituyó. En el otoño de 2004, las razones de la destitución fueron que el ahora ex decano era "autoritario, antidemocrático e ineficiente". En cambio, ayer, se inculpó a Ceruschi Frías por "incumplimiento de los deberes a su cargo e inconducta".

Ayer la votación se llevó a cabo a las 10 de la mañana en la sede de Ingeniería de avenida Las Heras 2214. Al igual que en el primer acto de destitución, votaron 11 consejeros a favor de esa medida sobre un total de 16. Sin embargo, a diferencia de la vez anterior, ayer no participó ninguno de los consejeros estudiantiles.

Esta doble destitución ya se transformó en un hecho doblemente inédito en los 183 años de la UBA.

Antes de ayer el rector de la UBA, Guillermo Jaim Etcheverry, no había sido comunicado sobre la sesión extraordinaria en la que se votaría por segunda vez la destitución de Cernuschi Frías, cuando el anuncio de la reunión ya se había elevado en el sitio web de la Facultad de Ingeniería. Posiblemente alarmado, antes de que la votación se llevara a cabo, envío una misiva al vicedecano, Francisco Grasso. Allí le dice que el texto en el que se llama a sesión extraordinaria "propone la denegación de la totalidad de la produccción de la prueba de descargo ofrecida por el decano acusado. Ello de por sí contraviene abiertamente lo ya dispuesto en idéntico caso por el Consejo Superior". Se refería a la restitución de Cernuschi Frías aprobada por 16 consejeros superiores el 23 de junio del año pasado y que anuló la designación de Carlos Rosito, quién había sido su reemplazante en aquel momento.

Agustín Vanella, uno de los cinco representantes del Claustro de Estudiantes del Consejo Superior y ex presidente de la FUBA señaló que, "estamos en contra de la destitución porque es un nuevo intento golpista de los sectores que quieren utilizar a la universidad pública como una caja de dinero".

La posición de Vanella, un estudiante que está en contra de la destitución de Cernuschi, es que las razones de fondo que motivaron la destitución del ex decano, responden al informe que a mediados del año 2003 elevara el ex decano al Consejo Superior.

Al respecto Cernuschi Frías contó a Clarín que: "En 2002 observo hechos extraños relacionado con la hoy extinta Fundación Facultad Ingeniería". Y detalló: "Detecto una serie de convenios donde un grupo de unas 30 personas, muchos de ellos consejeros, constantemente están cobrando cifras de 1.000 y 2.000 pesos por trabajos que desde el punto de vista técnico carecen de valor científico. No acusé a nadie. Me llamó la atención".

Ese informe fue elevado por Cernuschi Frías al Consejo Superior de la UBA, el que lo envió a la Oficina Anticorrupción (OA) . Y la OA lo elevó en caracter de denuncia penal a mediados del año pasado a la Justicia. "Con este informe queda claro que hubo irregularidades; no queda claro que haya delito. Como existe la posibilidad de algún delito, fue remitido a la Justicia", explicó el vocero de la OA, Juan Pablo Urfein.

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