Mientras tanto, las agrupaciones gremiales analizaban el paro como "muy exitoso", cercano al 80%, con picos aún mayores en Córdoba, La Plata, Mar del Plata, San Luis, Litoral, Entre Ríos, Jujuy, Catamarca, y en la mayoría de los 56 colegios que dependen de universidades públicas de todo el país.
 
El paro había sido decidido en forma conjunta por ambas agrupaciones el 18 de marzo pasado, para reclamar —entre otros puntos— el blanqueo de las sumas en negro, un sueldo testigo de media canasta familiar, y la regularización de los numerosos profesores ad honorem. Una decisión que fue tomada, pese a que la nueva Ley de Financiamiento Educativo destinó este año $785 millones más que el año pasado a salarios universitarios. Pero los docentes esperaban avanzar sobre estos reclamos durante 2006, en una mesa de negociaciones que hoy parece estar jaqueada por mutuas acusaciones. "La mesa de negociaciones fue suspendida por el Secretario de Políticas Universitarias de la Nación, Daniel Malcom, justo cuando había que discutir estos puntos", dijo ayer a Clarín José Luis Molina, Secretario general de CONADU Histórica, con sede en 24 de las 39 universidades nacionales.
 
En realidad, según explicó a Clarín Carlos De Feo, responsable de la más moderada CONADU, "el problema es que "la Ley de Presupuesto Nacional 2006 no prevé aumentos de sueldo: sólo incorpora los aumentos ya otorgados el año pasado, que son una parte de lo que venimos pidiendo desde hace años. Un ayudante de primera hoy cobra $560, en vez de los $840 de un maestro de grado. Entonces, Malcom no puede decir que no hay plata o que esperemos a 2010, cuando el país tiene superávit fiscal todo los meses. ¿Por qué no lo dedica a la educación? ".
 
En medio de un fuerte nerviosismo, el Secretario de Políticas Universitarias negó a este diario afirmaciones de ambos gremialistas: "la mesa está abierta permanentemente y lo que dije es que la ley va a ir generando fondos en 2007, 2008, 2009 y 2010, no recién en 2010".
Alejandra Toronchik atoronchik@clarin.com