Los aspirantes a cursar la carrera de Medicina en la Universidad Nacional de Rosario volvieron a sufrir un bochazo masivo. A comienzos de este año, sobre un total de 3.100 inscriptos, apenas participaron de la Instancia de Confrontación Vocacional (ICV) 2.600. Luego de un examen y dos recuperatorios, terminaron ingresando solamente 923 estudiantes.
Ahora, en un nuevo intento, 101 alumnos libres se presentaron a rendir para adquirir el status de regulares, lo que les permitiría cursar las materias del segundo cuatrimestre. Pero todos rindieron mal, generando la queja del Centro de Estudiantes, donde, afirman, lo sucedido se trata de una "medida restrictiva más para el ingreso, que debería ser libre e irrestricto".
A diferencia de lo que pasó en febrero, donde en las preguntas se incluían conocimientos adquiridos en el secundario, ahora se evaluaron contenidos propios de la carrera.
Quienes se presentaron a rendir debían superar la prueba de Práctica en Terreno que, junto a Laboratorio, forman parte de la materia Crecimiento y Desarrollo. A diferencia de lo que sucede en otras asignaturas, donde se aprueba con 4, en ésta debía alcanzarse un 7,5.
Mientras las autoridades de la facultad solicitan que no se dramatice la situación y prometen estudiar cada caso cuando finalice el receso —que comenzó ayer y se extenderá hasta fin de mes—, la agrupación que reúne a los estudiantes reclama para las evaluaciones reglas "más claras y más justas".
Aunque el secretario general del Centro de Estudiantes, Guillermo Grigioni, admitió en diálogo con Clarín que el examen que reprobaron los 101 estudiantes era "bastante accesible", apuntó que las preguntas eran "abiertas" y las respuestas, "subjetivas". El objetivo de fondo, según su denuncia, es "fomentar que cada vez se presenten menos estudiantes y que no apruebe nadie".
Por eso, en la presentación que realizó ante la decana, Grigioni y sus colegas solicitaron que se revisen las pruebas y se expliquen los errores cometidos.
Además, la agrupación que reúne a los estudiantes denunció que los alumnos libres no están habilitados para presentarse como oyentes en las distintas materias, además de no contar con la posibilidad de acceder a clases de consulta.
Si bien desde el Decanato prometieron revisar la situación tras recibir un informe que deben elevar los docentes, los aspirantes aseguran que por el momento no recibieron ninguna respuesta oficial. Los estudiantes esperan que se otorgue la posibilidad de un recuperatorio y se desplace además a la responsable de la materia, María de los Angeles Zilli.
A principios de año, tras la Instancia de Confrontación Vocacional, Chiara advirtió un "déficit de formación" en los jóvenes que se presentaban para cursar la carrera de Medicina y mostró inquietud porque el nivel fue —dijo— "de regular para abajo".
* Mauro Aguilar. ROSARIO. ESPECIAL