En una tardecita más primaveral que la del 21 y al ritmo de bombos y platillos, unas 2.000 personas marcharon pacíficamente hasta el Congreso Nacional, donde hasta hubo fuegos artificiales y cantitos irónicos como \"qué locura, qué emoción, quieren pagar la deuda con el presupuesto de educación\". O \"con los huesos del pingüino vamo\' a hacer una escalera, para que en las facultades pueda entrar la clase obrera\".

La marcha fue convocada por la Federación Universitaria de Buenos Aires y la Conadu histórica, que agrupa a organizaciones docentes de Cuyo, Comahue, Nordeste, Patagonia San Juan Bosco, Patagonia austral, Salta, Tucumán, Lanús, La Matanza, La Rioja, La Plata, Quilmes, Jujuy, Nordeste, y Litoral, entre otras. También concurrieron la Asociación Gremial de la UBA, la APUBA (trabajadores no docentes), centros de estudiantes de todo el país y hasta estudiantes secundarios de los colegios Mariano Acosta y Moreno.

Entre los reclamos (reunidos en un documento que será entregado la semana próxima a las comisiones de Presupuesto y de Educación de la Cámara de Diputados), figura la duplicación del salario docente. \"Pedimos que se blanquee todo lo que cobramos en negro, todos los incentivos, becas, estímulos que son casi el 50% de nuestros ingresos. Y un salario de $ 800 para los cargos testigo (auxiliar de primera con dedicación semiexclusiva)\", explicó a Clarín Claudia Baigorria, secretaria adjunta de la Conadu Histórica. También, \"que se rente a los casi 40 mil docentes que hoy trabajan sin cobrar sueldo alguno en todo el país. Y que se abandone el proyecto del Banco Mundial de privatizar la educa ción, convirtiéndola en un negocio. Quieren traer universidades privadas y extranjeras e instalarlas en el país\", dijo el presidente de la FUBA, Santiago Gima (PO-Sociología).

También se exigió el inmediato abandono de la actual Ley de Educación, la reapertura de los comedores universitarios, mayor inversión en investigación, ciencia y tecnología y mejoramiento en laboratorios e infraestructura.

Sólo tres decanos acompañaron la marcha: Félix y Federico Schuster (Filosofía y Letras y Sociales, respectivamente) y Bruno Cernuschi Frías (Ingeniería) quien aseguró a Clarín que \"se debe abandonar la política universitaria creada durante el menemismo. Y que le quita materias a las carreras de grado, acortándolas, y pasándolas a los posgrados, que son pagos. Es decir, que de una manera encubierta busca arancelar la educación pública\".