El Instituto Balseiro arrancó sus actividades festivas por sus 60 años. Destinadas a la comunidad universitaria y al público en general, se extenderán hasta el viernes 7 de agosto.

Comenzaron con el acto central en el Teatro La Baita. Integraron la mesa académica el rector de la UNCuyo, Daniel Pizzi, la presidenta de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), Norma Boero, el director del Instituto Balseiro, Oscar Fernández, y la intendenta de la ciudad de Bariloche, María Eugenia Martini.

En ese ámbito Oscar Fernández destacó las épocas de turbulencias que pasó el Balseiro en su historia. “Mirado desde la actualidad, hasta parece casi imposible que una institución como el Balseiro haya no sólo podido sobrevivir sino además alcanzar los niveles de calidad y equidad que tiene en la actualidad”, resaltó. Asimismo indicó que esa continuidad ha tenido que ver en gran parte con el apoyo constante de la UNCuyo y de la CNEA. Por último subrayó el aporte de los egresados en proyectos científicos y tecnológicos de la industria nuclear, y en campos como el Plan Nacional de Medicina Nuclear.

Por su parte Daniel Pizzi celebró el aniversario de esta Institución al tiempo que mencionó que la humanidad está viviendo una etapa de innovación y generación de conocimiento en un contexto desafiante de trabajo interdisciplinario. “Sentimos que el gran desafío que se nos impone es el de nivelar la academia con la resolución constante de los problemas que tiene la sociedad”, dijo. Señaló que los grandes desafíos de hoy en la educación universitaria pasan por aggiornar permanentemente los planes de estudio.

La presidenta de la CNEA, Norma Boero, recordó especialmente al primer director del Instituto, José Antonio Balseiro. Destacó algunas características como la excelencia académica, el otorgamiento de becas de ayuda y el rol de los egresados en proyectos prioritarios del área nuclear. “Nunca antes el sistema científico-tecnológico tuvo tanta demanda laboral, con proyectos prioritarios y sustantivos que requieren tanto de ingenieros como de físicos de sólida formación”, comentó. Además alentó a los futuros graduados a “honrar su prestigio, su tradición y su historia para realizar con humildad, creatividad y compromiso su aporte personal y profesional”.

En tanto que la intendenta de la ciudad de Bariloche, María Eugenia Martini, resaltó la importancia de que el desarrollo de la ciencia y la tecnología sean aplicados a una mejoría en la calidad de vida de los ciudadanos. Expresó que en la Argentina la formación de recursos humanos en estos campos genera un enorme potencial de crecimiento.

En el encuentro las autoridades de la UNCuyo y la CNEA otorgaron al director del Instituto Balseiro placas conmemorativas del 60º aniversario. Asimismo, miembros del Balseiro entregaron cuadros con la resolución de su conformación a las autoridades de la Intendencia Municipal, el Consejo Municipal, la UNCuyo y la CNEA.

Alberto Maiztegui, uno de los docentes de los primeros momentos del Instituto de Física de Bariloche y autor del reconocido libro de introducción a la física “Maiztegui-Sábato”, cerró con una clase magistral de la historia del Balseiro. Recordó a Ronald Richter, el proyecto de la Isla Huemul y el rol de José Antonio Balseiro en el informe a Juan Perón sobre la iniciativa. También a Enrique Gaviola, y los cursos de verano de Balseiro en Bariloche.

 Maiztegui enfatizó que 6 años le bastaron a su fundador como director de la Institución -murió a los 42 años de edad, en 1962- para poder “hacer esta hermosa realidad” que hoy se llama Instituto Balseiro. Alentó a rememorar el esfuerzo del primer grupo de egresados en sostener y hacer crecer el proyecto que hoy sigue más vigente que nunca, gracias a los aportes de cada generación de estudiantes y docentes.

Se sumaron al acto autoridades de diversas instituciones de ciencia y tecnología referentes, como INVAP, la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), las universidades nacionales del Comahue, La Pampa, la Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, los institutos Mario Gulich, Nacional de Tecnología Industrial, la Fundación Bariloche y la Escuela Militar de Montaña del Ejército Argentino, entre otras instituciones.

Los festejos continuaron en el campus del Centro Atómico Bariloche con un homenaje a cuatro egresados del Instituto Balseiro, Antonio Manuel Gentile, Susana Flora Grinberg, Eduardo Alfredo Pasquini y Manuel Mario Tarchitzky, que fueron detenidos, desaparecidos o asesinados durante la dictadura militar de 1976-1983. En su memoria se plantaron cuatro árboles y se descubrieron placas.

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