El Programa de Movilidad Sostenible, perteneciente al Instituto de Ciencias Ambientales, realizó un estudio comparativo entre las formas de desplazarse de las personas en el comienzo de la pandemia y en la actualidad. Entre los puntos mas destacados se encuentra que aumentaron los traslados por trabajo o estudio a la UNCUYO, pero más aún por trabajo fuera de la Universidad respecto del 2020. Los movimientos por ocio y compras también se incrementaron, posiblemente por que hubo menores restricciones.
Los datos surgen a partir de una encuesta que se realizó durante mayo de este año y que contó con más de 150 participantes. El informe toma de referencia un primer estudio que se hizo durante el aislamiento social, preventivo y obligatorio en el 2020.
Entre los resultados se puede observar una notable disminución del uso del transporte público respecto de la situación pre-pandemia. En contraposición, la opción que más aumenta a la hora de movilizarse es la del auto o la moto, medios utilizados individualmente y también de modo compartido. El caminar y el uso de medios de transporte no motorizados se mantienen en valores bajos frente a la expectativa generada al comienzo de la pandemia.
Las preguntas centrales estuvieron orientadas a responder sobre cómo y cada cuánto las personas se trasladan por distintas actividades, ya sea por estudio, trabajo, hacer compras, ocio y cuidado de personas a cargo. Casi la mitad de las personas respondieron que cambiaron su forma de trasladarse por miedo al contagio, lo que explica la disminución de los valores de uso del transporte público. Entre las razones se encuentra que una cuarta parte lo hizo para adquirir hábitos más saludables. Esto se contrapone con lo poco que aumentaron las caminatas y el uso de bicicletas, y otros medios no motorizados.
Entre las conclusiones del informe se destaca que si bien muchas personas expresaron conocer la implementación de medidas para incentivar el uso de la bicicleta, es evidente que es preciso alentar el uso de este modo de otras maneras. Al mismo tiempo, se plantea la necesidad de incorporar nuevas medidas de seguridad sanitaria para que las personas vuelvan a confiar en el transporte público y no siga aumentando el uso de modos motorizados individuales, como el auto o la moto.
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