El Consejo Superior aprobó por mayoría, una reforma en el DAMSU que reestructura sus costos financieros; necesario para hacer frente a los altos costos de los servicios de salud. Se trata de un plan integral con diferentes medidas que buscan darle sostenibilidad financiera. Los criterios adoptados están relacionados con la solidaridad y la equidad para asegurar que se puedan prestar los servicios.
La presentación estuvo a cargo de la presidenta del directorio de DAMSU, Gabriela Roculé, que explicó la propuesta y respondió dudas junto a integrantes del Directorio.
Escenario financiero desfavorable
Durante el 2024 se desreguló el sistema de salud y como consecuencia de eso aumentaron los costos de las prestaciones entre un 100% y un 700%; pero los salarios (que son la fuente de ingresos de DAMSU) no crecieron en la misma proporción. Subió el valor de la consulta médica y de varias prestaciones que se incrementaron posteriormente como un efecto dominó.
Frente a esta situación se diseñó un plan integral que busca fortalecer al DAMSU y evitar el riesgo de que no se puedan prestar servicios. En la actualidad el 28,50% de todo el presupuesto del DAMSU se destina a tratamientos de altos costos (en este momento son 50 afiliados de un total de más de 27 mil). Además, el 60% de los afiliados aporta el mínimo por todo su grupo familiar que son 70 mil pesos, lo que representa el 45% del total de los ingresos del DAMSU.
En qué consiste el plan integral
Se aprobaron cuatro medidas para no arriesgar la prestación de servicios de DAMSU y para incrementar sus ingresos, hoy insuficientes para afrontar los gastos.
Se concretará una apertura para que 1.200 graduados (entre titulares y su grupo familiar) de la UNCUYO, de entre 22 y 35 años, que elijan afiliarse a DAMSU. Tendrán un régimen similar al de los adherentes y la cuota será inferior al resto del sistema de salud.
Otra de las medidas involucra a los adherentes. Se va a ajustar su aporte básico, según el rango etario. Los adherentes de entre 18 y 25 años van a pagar el básico y a medida que se aumente la edad se va a ir incrementando el aporte de manera gradual, conforme a lo que sucede en el resto del sistema de salud.
Por otro lado los jubilados actuales y los nuevos jubilados estarán bajo el mismo régimen. Este cambio será gradual, de acá a 18 meses.
La cuarta medida del plan integral implica un cambio en el criterio de los aportes de los afiliados. Ya no se considerarán aportes mínimos sino que todas las dedicaciones aportarán como jornada completa. Esto representará que algunos afiliados aportarán más y otros menos, de acuerdo a su situación de antigüedad, y su cargo.
El menor aporte rondará los 40 mil pesos y corresponde a agentes que tienen cargos menores, baja dedicación y con muy poca antigüedad. El aporte promedio se estima en 106 mil pesos.
Un Jefe de Trabajos Prácticos con dedicación simple que recién ingresa, va a pasar de aportar 69 mil pesos a 50 mil.
Quienes tendrán el mayor incremento pagarán $136.400 adicionales al aporte actual.
De manera paulatina, y a medida que se logre el equilibrio, se va a disminuir en 1% los aportes del personal.
Gabriela Roculé, presidenta del directorio de Damsu.