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Cruz diablo

El paro de los docentes universitarios fue levantado, sin embargo, la Facultad de Filosofía y Letras de la UNCuyo siguió tomada por los estudiantes que reclaman, entre otras cosas, la renuncia de profesores vinculados a dictaduras militares y el retiro de símbolos religiosos del edificio educacional.

13 de septiembre de 2005, 01:12.

Por Daniel Calivares

Agencia Taller

dcalivares@yahoo.com.ar

El lunes 12 de setiembre, se levantó la toma de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNCuyo, proceso que se mantuvo durante dos semanas y que finalizó por decisión de una asamblea estudiantil al considerarse un éxito en cuanto a la fuerza y llegada de las demandas que se exigían. Actuó en los últimos días la mediación de una mesa negociadora ofrecida por el rectorado.

Todo comenzó cuando "el martes 30 se decide tomar la facultad con dos razones fundamentales, por una parte, el apoyo a los docentes universitarios y por otro lado, reivindicaciones que tienen que ver más con el sector estudiantil" explica a Agencia Taller, Sergio Cancio, estudiante de la facultad.

El paro de los docentes universitarios duró más de dos semanas, cuando éste fue levantado las autoridades de la UNCuyo pudieron dar cuenta de que los reclamos iban más allá de un apoyo a los profesores.

"Hay un primer bloque de reivindicaciones que tienen que ver con las trabas burocráticas que tienen los estudiantes, sobretodo está enfocado en que hay muchos estudiantes que están laburando y que no pueden cursar, que no se les permite cursar. La facultad dispone no sólo este cursado obligatorio sino una serie de trabas burocráticas que le impiden laburar y estudiar a la vez" afirma Cancio.

Entre los reclamos que realizan los estudiantes, y que se han podido escuchar en las asambleas del miércoles 7 y viernes 9, donde hubo entre 400 y 500 personas, están los pedidos de "triple turno de cursado (mañana, tarde, noche), medio boleto estudiantil universal en todas las líneas de transporte, la no obligatoriedad del cursado, la anulación del sistema promocional, esto es que tenés que tener tantas materias para pasar de año y la anulación de las correlatividades en bloque, que vos tengas que tener esta materia para cursar otra, salvo que sean materias con contenido creciente de conocimiento; y eliminación de la mesa castigo. Eliminación de todo tipo de aranceles administrativos, tanto encubiertos como no encubiertos, la eliminación de toda restricción al ingreso, que todos los idiomas instrumentales sean considerados y dictados como una materia más y que no sean tenidos en cuenta para pasar de año hasta que sean totalmente gratuitos".

Según Violeta Ayles, delegada de los estudiantes de filosofía, hay un segundo bloque de reivindicaciones que "que tienen que ver más con la libertad de expresión adentro de la facultad, el respeto a la diversidad y la práctica de la democracia adentro de la facultad".

Ayles, en diálogo con Agencia Taller, explicó que los estudiantes "pedimos mayoría estudiantil en todo órgano de gobierno universitario porque en este momento tiene minoría estudiantil siendo que nosotros somos el claustro mayoritario, repudio a la Fundación IDEAS que es una fundación que existe en nuestra facultad, que convierte a nuestra facultad en un kiosco que toma a la educación como una mercancía, queremos los cursos de posgrado gratuitos, libres y gratuitos para todos al igual que los talleres de extensión universitaria". Con respecto a IDEAS, Ayles afirmó que "Esta fundación tiene gran injerencia sobre la facultad, es una figura que determina la Ley de Educación Superior, que es la del autofinanciamiento de las facultades, cuando, en realidad, para eso nosotros pagamos nuestros impuestos".

La estudiante de filosofía agregó que los estudiantes exigen "total libertad de expresión, retiro de todos los símbolos religiosos e ideológicos impuestos por la institución y posibilidad de crear cátedras libres y paralelas".

"Esta facultad exhibe un gran número de símbolos religiosos desde cruces en las aulas hasta una virgen de dos metros en el primer piso de la facultad y una cruz inmensa en el aula magna que dice a 500 años de la evangelización de América" afirmó Ayles y agregó que también se reclama "el repudio y la renuncia de todos los docentes que participaron o legitimaron a las dictaduras militares, nos referimos a docentes que entregaron a alumnos o compañeros de trabajo, en ese mismo momento se convirtieron en genocidas y en realidad, no solamente no podrían estar impartiendo educación sino que deberían estar en la cárcel". Entre los docentes acusados estaría Carlos Orlando Nallim, quién fuera miembro del Consejo Directivo de la facultad tomada por los estudiantes y Ministro de Cultura y Educación en la última dictadura militar. "Estamos haciendo toda una investigación en base a los docentes que participaron y de qué forma participó cada uno pero también hay otra denuncia clave que tenemos que hacer, que es docentes que desde su libro de cátedras siguen sosteniendo ideológicamente la dictadura" afirmó Ayles

La estudiante agregó que "salieron algunas propuestas dentro de la asamblea que fue ponerle al Aula Magna el nombre de Susana Bermejido, quien fue presidenta del centro de estudiantes de esta facultad, asesinada por un grupo parapolicial durante la dictadura. También salió la propuesta de hacer un gran mural con el nombre de los desaparecidos de esta facultad".

El tercer bloque de reivindicaciones que reclaman los estudiantes contempla, entre otras cosas, el reclamo de mayor cantidad de becas y de mejor calidad. Una de las soluciones que proponen los estudiantes es que la fotocopiadora ubicada en el edificio y el bufette pasen a control estudiantil, y que el dinero que se gane sea invertido en becas, investigaciones y otras necesidades del estudiantado.

"Queremos una universidad al servicio de los trabajadores y el pueblo" afirmó Andrea Peña.

La toma continúa

En la asamblea del viernes 9, casi 500 estudiantes votaron a favor de sentarse con las autoridades de la UNCuyo  durante a negociar pero que mientras tanto el edificio continuara tomado.

Sin embargo, llegar a ese momento no fue fácil para los estudiantes. Durante la asamblea Gabriela Scodeller, ex consejera del Consejo Directivo por el claustro de graduados, denunció que se había hecho una asamblea extraordinaria del Consejo y que el Decano Adolfo Cueto había denunciado a varios estudiantes con nombre y apellido ante las mayores autoridades de la universidad y que "fueron intimados tanto los docentes como los no docentes a no participar en el interclaustro de hoy (por la asamblea del viernes) diciendo que como están en relación de dependencia con la facultad tuvieran cuidado de participar en esta asamblea porque era de hecho reconocer órganos que ya existen como los consejos y asambleas universitarias" explicó Scodeller, que también afirmó que por estos hechos y por estar en desacuerdo con una resolución votada en la reunión, en la que se intima al representante de los alumnos a restituir el edificio a las autoridades, ella había renunciado al Consejo.

Después de varias horas de debates, el estudiantado tomó la decisión de nombrar representantes, entre los que habían estudiantes independientes y de agrupaciones, y reunirse con el Vicerrector Arturo Somoza,  la Secretaria Académica de la UNCuyo Estela Zalba, el decano Adolfo Cueto, el Secretario de Bienestar Universitario Fabio Erreguerena y la secretaria académica de la Facultad de Filosofía y Letras Adriana García.

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