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Desocupación estable frente a malas condiciones labores

La desocupación ha dejado de ser una preocupación inminente para la agenda del gobierno argentino, sin embargo las condiciones laborales distan bastante de ser las óptimas.

15 de abril de 2005, 06:28.

El trabajo en negro, el subempleo, las “regularizaciones” de la AFIP y el ANSES, la indexación de los jueces, el aumento de la inflación y el atraso salarial, sumado a los controvertidos planes de Jefes y Jefas de Hogar abren un cuestionable panorama sobre las condiciones laborales de los mendocinos.

El desempleo consolidó su tendencia a bajar desde que comenzó la recuperación de la economía, aunque sigue en niveles altos teniendo en cuenta que alrededor de 1.600.000 argentinos se encuentran sin trabajo. Asimismo la tasa de desocupación bajó al 12,1%, sin contar los involucrados en el Plan Jefes de Hogar con quienes se alcanzaría un total de 16,2%, de acuerdo a los datos otorgados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). En Mendoza las estadísticas son aún mejores. También de acuerdo al último relevamiento del INDEC, la tasa de desempleo disminuyó un 10,4%.

Sin embargo si ponemos el foco en la calidad de las ocupaciones que crea la economía, descubrimos que la crisis agravó la tendencia de los años 90 sobre la precarización del empleo, es decir, puestos de trabajo inestables, con bajos salarios y sin beneficios sociales. La Encuesta Permanente en Hogares (EPH), realizada por el INDEC, indica que al 49 % de los asalariados no se les realiza el descuento jubilatorio. Por lo tanto tampoco cuentan con obra social, asegurando una importante población vieja sin ingresos y sin atención médica.

Las tasas básicas del mercado de trabajo en la Argentina no reflejan en toda su magnitud el deterioro de la situación laboral, ya que entre la población ocupada hay un predominio de los empleos precarios que no se agota en el problema de la subocupación, según la opinión generalizada de los abogados laboristas.

La AFIP ratifica la intención de combatir el trabajo no registrado verificando el cumplimiento de las condiciones laborales y garantizando el respeto de los derechos del trabajo y la protección social a fin de incorporar al sistema de seguridad social a los trabajadores excluidos. Por otro lado, la Subsecretaria de Trabajo dependiente del Ministerio de Gobierno de la Provincia establece entre sus funciones las de aplicar la penalidad por infracciones a la legislación laboral y hacer cumplir dicha legislación por intermedio de sus dos direcciones: Relaciones Laborales y Asuntos Técnicos y Jurídicos. Según los deberes que tendrían que cumplir estos entes gubernamentales, la mitad de los mendocinos que cobran su sueldo en negro deberían ser blanquedos.

La realidad indica que se está conformando una sociedad que trabaja para vivir el presente y deja al libre albedrío la suerte del futuro sin exigir lo que le corresponde. La carencia de una población activa que no aporta para una jubilación conformará una sociedad con problemas radicales en el futuro. Los ingresos de la canasta familiar no alcanzan para alimentar una familia como se ha demostrado en varios programas televisivos que ironizaron con el tema. A esto se le suma al temor por la pérdida del trabajo que pese a los porcentajes anunciados anteriormente, aun persigue a los argentinos demostrando factores condicionantes para mantener anestesiada a una sociedad que no deja de ser manipulada por las grandes ligas del poder.

Entonces, para finalizar, una pregunta: ¿ha diminuido la desocupación o simplemente está mal ocupada?

Carla Luna

carlaluna_uno@yahoo.com

Departamento de Política

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