Los becarios del programa médicos comunitarios dialogaron, en Casa de Gobierno, con el ministro de Salud Armando Calletti sobre las expectativas de insertarse en los centros de salud de la provincia para desarrollar actividades de prevención y promoción, atención primaria de la salud y fortalecer las estrategias tendientes a bajar índices de mortalidad materno-infantil.

El programa médicos comunitarios es un postgrado en salud social que implementó el Ministerio de Salud de la Nación, que se dicta en la facultad de Ciencias Médicas de la UNCuyo y se desarrolla en los efectores provinciales para especializar a profesionales de la salud -menores de 45 años- en atención primaria.

Los primeros becarios ingresaron al programa en octubre del año pasado, en dos niveles: no rentado, que sólo cursan el postgrado, y rentado que deben cumplir 25 horas semanales de asistencia a los centros de salud, más 10 horas de trabajo en las zonas aledañas a esos efectores y asistir a las clases obligatorias en la UNCuyo y las tutoriales en los centros de salud.

Hasta el momento cursan el postgrado 52 profesionales no rentados y 21 rentados que cumplen funciones en centros de salud de zonas urbano marginales con el propósito de reforzar la atención interdisciplinaria y el trabajo comunitario en esas áreas, según lo determinó la Dirección de Asistencia Sanitaria del ministerio provincial, después de evaluar las necesidades departamentales.

A partir de este mes se incorporan, en la segunda etapa del programa, 10 profesionales de la salud rentados y 20 no rentados, entre los que figuran médicos, psicólogos, enfermeros, nutricionistas y odontólogos.

El director del postgrado, Luis Antonio Loyola, acompañó a los becarios y destacó la política de formar “recursos humanos en salud pública y atención primaria”; mientras que el ministro convocó a los médicos “a priorizar las actividades de prevención y promoción de la salud que Mendoza tiene como estrategia”.

Los becarios que comenzaron el año pasado explicaron que ya realizaron el diagnóstico de situación y elaboraron proyectos en base a la problemática de cada zona para optimizar la prevención desde controles de embarazos, calendarios de vacunación infantil, seguimiento de pacientes crónicos como diabéticos e hipertensos, o nuevos enfoques para abordar la desnutrición”.

La modalidad de este exigente postgrado permite a la provincia incorporar a profesionales comprometidos con la atención primaria de la salud y desplegar actividades en la comunidad, con la meta de prevenir la enfermedad y cuidar la salud. La carga horaria y responsabilidad que demanda el programa de postgrado hizo que algunos interesados desistieran de aceptar la renta y sólo optaran por cursar las clases obligatorias.

Esto indica que quienes están rentados han asumido un riguroso ritmo de trabajo y estudio.