Cecilia Ranua: con la crisis financiera internacional, reapareció el temor generalizado de muchísimas personas de perder el empleo. Según una especialista consultada por Noticiero 9, no toda la culpa es de la crisis. Lo que ocurre es que no ha habido una política transformadora y por eso cada vez que hay una debacle, lo primero que se resiente es el mercado laboral.

En los últimos tiempos pululan las noticias sobre despidos y suspensiones, también es notable la reducción de la demanda de trabajadores.

Azucena Reyes, socióloga e investigadora: cuando aparece una crisis, la crisis afecta principalmente a la actividad económica y cuando la actividad económica se ve afectada se ven afectados los empresarios y cuando los empresarios ven peligrando la rentabilidad y la ganancia de su capital, inmediatamente toman decisiones sobre la planta, o sea sobre la masa de trabajadores. No son sólo las condiciones actuales las que producen inseguridad en el trabajo, sino que son las características del modelo de acumulación, que permanentemente nos tiene en situación de inseguridad, de inestabilidad, de incertidumbre y actualmente, por supuesto, la incertidumbre, en razón de que no conocemos cuál va a ser el comportamiento del capital, del gran empresario, la gente tiene sus miedos, por supuesto.

Según la titular de la Dirección del Centro de Investigación de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNCuyo, es muy posible que la reducción de la actividad económica derive en un aumento de la desocupación, la subocupación o la sobreocupación. Otro fenómeno que reaparece es el crecimiento del cuentapropismo. Estas situaciones son conocidas por todos, porque las vivimos hace poco, durante y después de la crisis de 2001. Pero nos preguntamos si el crecimiento económico sostenido que vivimos desde 2003, nos permite enfrentar este nuevo crack mejor parados.

Azucena Reyes, socióloga e investigadora: eso no quiere decir sin embargo que a nivel de las condiciones de inserción en el mercado de trabajo hayan mejorado sustancialmente. Los niveles de desigualdad al interior del mercado de trabajo han persistido durante todo este periodo, la inseguridad y la incertidumbre también. Todo esto está como amortiguado con algunas medidas que el gobierno va tomando, pero son medidas de emergencia, no generalmente son medidas de transformación de las condiciones de inserción en el mercado de trabajo.