En ocasión de la visita que realizó la embajadora de Estados Unidos de Norteamérica a nuestra Universidad y dadas las actitudes de intolerancia y agresión sufridas por las autoridades universitarias que se encontraban presentes y la embajadora Vilma Martínez, el pasado 15 de octubre, el Consejo Superior de la Universidad Nacional de Cuyo emitió una declaración que reproducimos textualmente a continuación. Además agregamos el texto completo de la resolución.
Declaración del Consejo Superior
“La Universidad Nacional de Cuyo, que acaba de cumplir setenta años, tiene una larga y valorada cultura institucional de pluralidad y reconocimiento de la alteridad. Esta tradición recuerda, sin embargo, épocas en que en nuestro País reinó la intolerancia encarnada en distintas dictaduras y que culminó en la más larga de las noches de desconocimiento de la dignidad de los pueblos y de las personas. Nuestra Universidad no estuvo al margen. La experiencia vivencial en la mayoría de los casos y la memoria en los más jóvenes, se rebela ante brotes de intolerancia, que nos preocupan y nos ocupan.
Conociendo el comportamiento de las agrupaciones estudiantiles que participan activa y responsablemente de la vida universitaria, no considerábamos esperable hechos como el acaecido, en oportunidad de la visita a nuestra Universidad de la señora Embajadora de los Estados Unidos de Norteamérica. Está claro que esta acción provino de sectores minoritarios de la vida institucional universitaria, que privilegian sus banderas particulares, frente al interés institucional, construido colectivamente. Ello se potencia, por la llamativa repercusión que le otorgan algunos medios masivos de comunicación, que consideran noticia de tapa un acto de agresión y no los eventos constructivos y los aportes que diariamente hacen instituciones como la nuestra.
La acción llevada a cabo por un minúsculo grupo contra las autoridades de esta Universidad, Vicerrector a cargo del Rectorado, varios Decanos de Facultades y Secretario de Relaciones Internacionales e Integración Regional Universitaria y de la Embajadora invitada, no impedirá que sigamos avanzando en el camino del servicio a nuestra comunidad, la integración latinoamericana y la cooperación internacional.
Este Consejo Superior asume plenamente la responsabilidad de conducción que le otorga la Constitución, la Ley y el Estatuto Universitario y advierte que evitará que la intolerancia, reñida con el más elemental respeto a la persona humana y su dignidad, se adueñe de la Universidad”.