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“EN MENDOZA NO PASÓ NADA”

……………………………………Es un tipo bonachón. De esos que siempre está de buen humor y que, cosa curiosa, al mismo tiempo, no deja de indignarse. Se expresa con un lenguaje llano y, al mismo tiempo, cosa curiosa, contundente. Es un periodista que juega a ser documentalista. Le sale tan bien, que todo el mundo cree que es un documentalista jugando a ser periodista. Se llama Rodrigo Sepúlveda; es uno de los directores del documental “7746 Legajo CONADEP”, el segundo de su carrera (el primero fue D2). Una obra realizada íntegramente en Mendoza, por mendocinos, y reconocido en festivales internacionales. En la foto, una escena del documental.

23 de marzo de 2007, 18:30.

imagen "EN MENDOZA NO PASÓ NADA"

La SBU (Secretaría de Bienestar Universitario) también brindó su aporte a este emprendimiento. Ya que estamos, empezamos una charla con Rodrigo. Pero, como nos conocemos, sabemos que no podremos con nuestras raras inclinaciones y hablaremos de otros “asuntitos”, no sólo del filme...

Primera persona

7746 Legajo CONADEP es una historia en primera persona. El protagonista no sólo cuenta lo que le pasó a él. Lo más importante de su relato es lo que dice de otras personas, a las que le pasaron cosas terribles. Un suboficial de la Policía Federal en Mendoza narra crímenes del Estado, antes y durante la última dictadura. Pero atención: no hablamos de un pasado lejano, perdido; hablamos del presente, de cómo sigue vive ese drama entre nosotros. Nos importa AHORA.

Te recuerdo, por las dudas. La CONADEP fue una comisión formada en 1983 por el entonces Presidente Raúl Alfonsín, para investigar delitos de la última dictadura (1976-1983). La comisión vino a Mendoza. Entre otras actividades, entrevistó a un suboficial de la Policía Federal, cuyo testimonio quedó registrado en el legajo 7746. Rodrigo Sepúlveda, periodista radial, trabajador y profesor de la UNCuyo, encontró ese documento años después. Y se propuso hacer algo con eso; convocó a gente y creó con ella un documental.

Buena voluntad

El trabajo necesitó más que buena voluntad. Otro periodista, docente y militante de los Derechos Humanos, Ernesto Espeche, realizó un aporte inicial de dinero. La UNCuyo, tras declarar el proyecto “de interés universitario”, aportó dinero y prestó recursos técnicos del CICUNC (el centro de información y comunicación). La obra fue estrenada hace un año. Más allá de este respaldo, fue un trabajo a pulmón: imaginate lo que sintieron en ese momento sus realizadores y realizadoras cuando vieron las salas llenas del Cine Universidad; o cuando fueron invitados a facultades e instituciones. Es fuerte.

¿Viste que se dice a veces que las personas actúan por interés egoísta, por conveniencia? ¿Y cómo explicar tanta pasión para un documental? Ya no es egoísmo; es convicción. Dice:

“El reclamo es un reclamo de memoria y justicia, porque en Mendoza no hay ningún condenado por los delitos que se cometieron antes y durante la dictadura. La idea es demostrar que la impunidad convive con nosotros, representada en estas personas que están sueltas, libres, a pesar de haber cometido delitos de secuestros, torturas, asesinatos, desapariciones... Y que uno tiene que saber quiénes son esas personas, porque no pueden compartir el mismo espacio que nosotros. No somos iguales.”

Justicia

Este trabajo se propone, además de la denuncia, aportar a la Justicia. El momento es apropiado: hace poco, la Corte Suprema anuló las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, esas que había promovido el gobierno radical y que suspendían los juicios contra los dictadores. Ahora las investigaciones pueden reactivarse.

“Mucha gente cree que en Mendoza no pasó nada. Que la represión se vivió casi excluyentemente en Buenos Aires, Tucumán, Córdoba, en otros lugares.”

Y entonces, nos pareció oportuno pensar en la persona que mira el documental. Vos, por ejemplo. ¿Qué quieren decirte los realizadores?

“Porque uno dice: ‘estamos hablando de cosas que pasaron hace treinta años. Ya está, demos vuelta la página’. Eso nunca va a ocurrir, creo yo, hasta que no haya justicia. Le hablamos a esa gente. Al ciudadano mendocino común. [...] La idea es esa: interpelar a la persona que está mirando para que se indigne.”

Distinciones

El reconocimiento de mucha gente fue inmediato. Pero no sólo en Mendoza. El Movimiento de Documentalistas les dio una distinción. Recientemente fueron seleccionados para exhibir el mediometraje en el Festival Internacional de Cine de Mar del Plata. Y Rodrigo acaba de regresar de Cuba, donde el trabajo fue exhibido (Festival Internacional de Documentales Santiago Álvarez In Memoriam). Y nuevamente ese país los llama: ahora es el Festival Internacional de Cine Pobre, de Gibara, en abril.

El documental 7746 Legajo CONADEP fue realizado también por Cecilia Agüero. Y participan: Ernesto Espeche, Belén Faiozzo, Gisela Levín, Agustina Guillén, Anahí Barrera, Carlos “Indio” Leiva, Andrés Contreras, Matías Russo,Daniel Álvarez, Valeria Castro, Javier Vrana, Silvana Torres, Pablo Pérez Delgado y Marcelo Sisso.

La semana que viene te contamos sobre el próximo tema de documental de Rodrigo Sepúlveda: el gatillo fácil.

Germán Fernández
Para ¡en contActO!, boletín de la Secretaría de Bienestar Universitario
UNCuyo - 2007
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