Nuestro entrevistado es ex empleado de YPF y miembro de una agrupación que se constituyó hacia fines del año 2003 en Mendoza con el nombre de Coordinadora por la Recuperación de la Dignidad y el Patrimonio Nacional.
¿Qué paso concretamente el día martes en la destilería de YPF en Luján de Cuyo?
Un grupo de compañeros de la Coordinadora y del Foro Nacional Ypefiano (FO.NA.Y), nos ponemos de acuerdo en encadenarnos a los portones de la planta de despacho de la terminal de combustibles. El objetivo fue hacer oír nuestro reclamo por la re-nacionalización de YPF, y por el pago efectivo del gobierno que se viene postergando hace 14 años. Todos los gobiernos fueron pateando la pelota para adelante, prometiendo cosas que nunca cumplieron, incluido este gobierno. Decimos que el reclamo es por dos grandes estafas que hay contra el pueblo argentino. Una es la venta y privatización de YPF, y otra es el no pago de la ley de propiedad participada a los ex trabajadores de la empresa. Decidimos encadenarnos, y después de unas horas, tras negociaciones y reclamos por parte de la empresa de que despejáramos el paso de los camiones para la carga de combustibles, fuimos “conminados” a desalojar, porque sino se iba a llevar adelante una represión.
Los fiscales y los jueces están muy atentos a cumplir las órdenes que emanan de las empresas privatizadas, pero jamás hacen justicia con los reclamos de los trabajadores. Hacen justicia solamente con los reclamos de los empresarios. En ellos incluimos a la Doctora Anabel Orozco, de Mendoza; al Juez Claudio Bonadío y tantos otros que siempre están al servicio de los poderosos y las multinacionales, y no de la gente a la cual no se le han respetado sus derechos de parte del gobierno ni de la empresa Repsol.
Concretamente, en referencia a las denuncias ante la justicia que llevan a cabo los ex empleados de la petrolera, Amín aclaró lo siguiente: “Nosotros tenemos una causa penal contra YPF que está en manos del Juez Bonadío, en Buenos Aires, y le decimos que hay inculpados porque “Repsol” compró nuestras acciones al comprar la empresa. Nuestras acciones nunca nos la pagó nadie, ni el Estado ni Repsol YPF. Nuestros compañeros, que están dentro de la empresa, cobraron en el año 1996 ochenta mil dolares (80.000 U$S) y a nosotros pretenden pagarnos ahora diez mil pesos ($10.000) en bonos, entonces decimos que es una estafa. El reclamo nuestro es justo y las acciones del Gobierno y de la empresa son una estafa contra la mayoría de los Ypefianos; y de hecho consideramos que la privatización de YPF fue una gran estafa al pueblo argentino.
Esta lucha, que como comentaba nuestro entrevistado lleva 14 años, no se libra en forma organizada en todo el país, esto lo demuestran sus declaraciones al decir que: “Lamentablemente están muy atomizadas todas la agrupaciones (...) no nos une una lucha coordinada a nivel nacional. Es cierto, hubo ese mismo día algunos actos de reclamo en Neuquén y en Salta, pero son débiles. Primero porque estamos divididos, y en segundo lugar, porque mucha gente ya se resignó al engaño, a perder, a que en esto era imposible vencer, y bueno nosotros decimos que si nuestro reclamo es justo, tenemos que seguir adelante...
Moisés Ortiz
Departamento de Cultura
moises-ortiz@hotmail.com