Se trata de un proyecto de extensión social denominado “Soy Parte” que fortalece las iniciativas de los emprendedores por medio de la aplicación de técnicas de diseño y serigrafía. Es una iniciativa de docentes y graduadas de la Facultad de Artes y Diseño de la UNCuyo que se desarrolla en la Unión Vecinal “Angélica Civit de Suárez”, de Villa Hipódromo. Ahí mismo también funciona el Banco Popular de la Buena Fe, que presta pequeñas sumas de dinero a grupos de personas para el financiamiento de sus micro emprendimientos.
Comenzó con la creación de espacios educativos/productivos que a lo largo de los 6 meses de su ejecución capacitará alrededor de 55 personas dedicadas a micro emprendimientos productivos y de servicios. Están en marcha dos talleres productivos, uno de serigrafía y otro de papel artesanal, que permitirán ser aplicados a la presentación y comunicación del producto. Leticia Burgos, integrante del equipo universitario, precisa que de hecho “se puede hacer de esto un oficio que puede permitir el día de mañana obtener un ingreso.”
La comercialización es sin lugar a dudas, uno de los mayores obstáculos para desarrollar los productos artesanales. La propuesta busca también un principio de solución a este problema. Silvana Carrizo, que confecciona ropa, dijo que “está entusiasmada porque con la serigrafía yo misma realizare los estampados y no pagaré por hacer bordados como hasta ahora”.
Carina López, diseñadora industrial y sub coordinadora del proyecto, explica que también buscan hacer conocer su profesión y valorarla como una apuesta estratégica para este tipo de iniciativas productivas, demostrando que el diseño de productos y una excelente presentación puede estar al alcance de todos y no sólo de las grandes empresas. “La idea del proyecto surge porque yo también he sido micro emprendedora y en distintos programas de capacitación que he asistido me he dado cuenta que no se le da importancia a lo que es la presentación del envase, lo que es la vista del producto” precisa López.
“Si alguien produce dulces caseros y quiere comercializarlos y no sabe cómo, nosotros le damos la capacitación para que por medio de una etiqueta agradable los pueda vender”, aclara Mayra Moirones, diseñadora industrial, especializada en gráfica, e integrante del equipo. Se trata así de revalorizar el producto, y a través del diseño, fortalecerlo en uno de sus puntos más débiles, cuando se tiene que defender por sí mismo, frente a otros productos.
Se espera que en los seis meses de desarrollo del proyecto, la capacitación permitirá que los microemprendedores detecten y evalúen sus necesidades comunicativas de productos y servicios. A su vez contarán con las herramientas necesarias para montar en sus hogares un taller de serigrafía o de papel artesanal, con un equipamiento e infraestructura accesible a sus posibilidades, ya que el proyecto está dirigido a que sean viables sus aplicaciones en la comunidad. Y, así lo vive Beatriz Cruz, promotora del Banquito Popular de la Buena Fe, quien señaló que la capacitación es “didáctica, práctica y nos dan el material” lo que facilita la realización de los cursos.
“Soy parte”, es uno de las cuatro iniciativas que se están ejecutando en el departamento de Godoy Cruz, financiadas a través de los Proyectos Sociales de Extensión Universitaria “Prof. Mauricio López”, de la Secretaría de Extensión Universitaria.