En el marco de las I Jornadas Institucionales del ITU, se realizó en la Universidad Nacional de Cuyo el tercer y último encuentro donde hablaron sobre vivencias y aprendizajes en situación de pandemia. Contó con dos invitadas expertas en educación y tecnología provenientes de Latinoamérica y Europa.
La apertura estuvo a cargo de la directora del ITU, Fabiana Molina, quien resaltó el compromiso y la capacidad de adaptación de toda la comunidad educativa al contexto actual. Asimismo presentó las expositoras y le dio la bienvenida a los asistentes para luego dar comienzo al conversatorio, una instancia de capacitación dirigida al personal de apoyo académico.
La primera ponencia la ofreció la PhD. Adriana Vargas-Martínez del Tecnológico de Monterrey de México, quien mostró las estrategias de acomodamiento a la realidad impuesta por la pandemia. En este sentido, dio varios ejemplos de cómo hizo el Tec para garantizar los procesos de aprendizaje a sus estudiantes en algunas de sus carreras y sedes. También hizo un paneo del sistema y del modelo que lleva adelante esta prestigiosa institución. Y destacó la importancia vital de la tecnología en estos tiempos, a través de ejemplos y dispositivos.
La segunda charla fue introducida por la Ingeniera pedagógica Marta Toribio del IUT de Bayonne de Francia, la que, con una buena capacidad de síntesis y maestría, brindó un abanico de alternativas para garantizar la mejora cualitativa en los procesos de evaluación. Como responsable institucional de educación a distancia, mostró las “experiencias de la evaluación por competencia en la modalidad de pandemia” y las estrategias que implementó su IUT para enfrentar a esta realidad desafiante. Expuso sobre el modelo y su adaptación en cuanto a prácticas de enseñanza, aprendizaje y evaluación.
Al momento del cierre y luego de haber escuchado las ponencias, instó a seguir en este camino de permanente actualización e innovación, con el que se evidencia que aún desde las diferencias entre las dos instituciones, los métodos y dispositivos de adecuación a la modalidad llevados adelante por el ITU, han sido muy similares.
La importancia vital de la tecnología en el contexto actual
La jornada inició con una charla de la doctora Adriana Vargas-Martínez en representación del Tecnológico de Monterrey. El tema fue “desarrollo de competencias en la modalidad remota de aprendizaje”. Vargas-Martinez es Directora Regional del departamento de Mecatrónica RMty (Campus Monterrey, Campus Laguna y Campus Saltillo) y Coordinadora de la alianza Tec-MIT.
La presentación inició haciendo referencia a la primera junta presencial de la que participó Adriana luego de un año y cinco meses de trabajo virtual, lo que reflejó que el Tecnológico de Monterrey cuenta con herramientas muy interesantes para sobrellevar la situación actual.
La institución tiene 26 campus en 23 ciudades diferentes. Se vincula con el sector privado, el que a menudo realiza donaciones de equipos. A causa de la pandemia, la experta señaló que detectaron qué tan diferentes se impartían las asignaturas en una ciudad o en otra, denotando esas considerables diferencias con las infraestructuras de los diversos campus.
La doctora comentó que el inicio de la pandemia ocurrió en pleno cambio de modelo educativo de la institución, el cual estaba diseñado para que tuviese una alta presencialidad. En ese momento, muy pocas personas trabajaban en modalidad virtual. El 90% de la actividad era presencial, por lo que fue todo un desafío tener que rediseñar completamente la estrategia.
De manera ilustrativa, señaló a través del sitio www.tec.mx las medidas que están aplicando en la institución. En el portal aparece una pestaña titulada “Modelo HyFlex + Tec” donde se explica “HyFlex+ Tec” como una experiencia educativa híbrida y flexible que hará posible “la adaptación a escenarios variables en distintos momentos del semestre, de acuerdo al semáforo de cada ciudad, cada campus e incluso las necesidades particulares de estudiantes y profesores”, contó Vargas-Martínez.
Si se sigue explorando el sitio, se puede apreciar también una sección llamada “Cuida tu mente” que, según sostiene la experta, “cuenta con una línea de apoyo las 24 horas donde participan psicólogos y nutriólogos”. La misma está disponible tanto para el uso de los estudiantes como para el profesorado.
Asimismo, “Smart Learning Factory” fue uno de los grandes proyectos estratégicos que adoptó este año la institución. Consiste en un laboratorio automatizado que, mediante el uso de robots, le permite al estudiante tener una experiencia vivencial de manera remota. El alumno se conecta en la red y lo que realice en interfaces se verá reflejado en equipo físico.
Otro de los proyectos implementados fue “Lab @ Home”. Mediante la implementación de kits de muy bajo costo (20 dólares americanos), se le permitió al estudiante poder aplicar lo que ve en clase desde su casa.
La docente dijo que, gracias a estas medidas, se logró la retención de los estudiantes. El alumno estuvo “enganchado” con la implementación de los kits y esto se vio reflejado en las evaluaciones a los docentes mediante ECOAS. El estudiante tenía que colocar una puntuación del 1 al 10 al profesor y los resultados transmitieron un contundente 9.98.
La evaluación como proceso
Por su parte, la Ingeniera pedagógica Marta Toribio, del IUT de Bayonne de Francia abordó el tema: “Experiencias de la evaluación por competencia en la modalidad de pandemia”.
La presentación comenzó con un breve vistazo de la situación en la que se encuentra Francia, que desde enero transita un confinamiento menos estricto. Explicó que existe un porcentaje muy bajo de estudiantes del UIT sin herramientas para acceder a la modalidad virtual. La especialista comentó también que hay un gran apoyo por parte de la institución a los docentes y en especial a su área. Dijo incluso que tuvo que incorporar dos personas al área debido a la cantidad de trabajo y a las demandas que surgieron en este contexto.
Ante el interrogante ¿qué hace un Ingeniero tecnopedagógico? Toribio destacó distintos puntos. El acompañamiento de docentes y estudiantes en el uso de las TICE (Tecnologías de la Información y la Comunicación en la Educación); el desarrollo de la FAD (Formación a Distancia) y de la virtualización de contenidos; la Formación a las herramientas digitales: se organizan talleres y sesiones de formación destinadas a los docentes en torno a las tecnologías educativas y la gestión de proyectos de innovación pedagógica nacionales e internacionales.
Asimismo, la ingeniera señaló dos ventajas de la pandemia: la primera es que la institución ya tenía una experiencia en formación a distancia y la segunda es el aprendizaje que ha supuesto la transformación virtual de contenidos de una modalidad presencial a una modalidad distante.
Marta Toribio expuso su perspectiva respecto a la instancia de “evaluación”: Sostuvo que se trata de un “proceso que consiste en recopilar información sobre los aprendizajes realizados por el alumno e interpretarlas para emitir un juicio y tomar las mejores decisiones posibles sobre la calidad de la enseñanza y el nivel de aprendizaje del alumno” (Leroux, 2018). Toribio destacó además la importancia de “alinear los objetivos de aprendizaje con las actividades a desarrollar y con la evaluación”.
También realizó un recorrido por las distintas modalidades de evaluación que puede adoptar el docente y recomendó herramientas para implementar en la virtualidad según el enfoque. Por ejemplo, si se utiliza una modalidad sumativa, se podrían implementar páginas como Kahoot, Quizz Moodle, entre otras; si se usa una modalidad descriptiva, puede usarse MindMapping, googledoc, office 365, etc. Y por último, si se tratase de una modalidad hermenéutica, se podría utilizar Karuta, moodle o screen-cast-o-matic.
Luego hizo hincapié en la importancia de observar la situación del alumno, es decir si posee el equipamiento necesario para cursar o cuál es su nivel de adaptación a la modalidad virtual. Sostuvo que es muy importante que el estudiante tenga capacidad de autonomía, porque si no puede ser autónomo en su educación va a presentar dificultades en el aprendizaje. Incluso señaló que esa es una de las grandes causas de abandono en el contexto que se vive actualmente.
La experta concluyó con la importancia de “configurar al docente”, de proveerlo de conocimientos y herramientas para que pueda afrontar la enseñanza remota. Declaró que la trampa y el plagio, en ciertas ocasiones, es responsabilidad del profesor por no implementar correctamente el instrumento evaluativo. Al respecto, también señaló estas dos instancias como una situación de “aprendizaje”. Resulta más importante que el estudiante se formule preguntas más que respuestas.
Los proyectos con el IUT de Bayonne
Desde hace más de 10 años y de manera ininterrumpida, estudiantes, egresados y docentes del ITU participan en intercambios y proyectos de cooperación con el IUT de Bayonne de Francia.
La experta se desempeña como líder del proyecto del Diploma Universitario en Administración de Sistemas y Redes 100% a distancia y en español. En su preparación, vino a Mendoza hace varios años y se reunió con docentes del ITU para integrarlos a la propuesta. Los profesores fueron capacitados en el uso de herramientas y aún en la actualidad tienen participación como tutores de esta carrera en la que todos los egresados de Redes de Datos y Telecomunicaciones pueden alcanzar ese diploma con total reconocimiento Académico.
Además el IUT de Bayonne es parte del Proyecto de Red/Consorcio Internacional (CIESUT), compuesto por 8 instituciones tecnológicas de nivel universitario superior. En este proyecto Marta Toribio tiene un rol clave y muy activo.
Aquí se puede ver el registro del conversatorio completo.
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