El experto del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Ricardo Quiroga disertó en la UNCUYO sobre el funcionamiento de créditos del organismo y las experiencias en Argentina y la región.
Se refirió a la estructura interna de la entidad, cómo trabaja en los países, cómo financia y cómo forma parte de las estrategias de desarrollo de los gobiernos. “Es un banco de los países y trabajamos en función de sus demandas y necesidades. Definimos algunas condiciones de capacidades, de gestión macro económicas y de riesgos financieros de los países", dijo.
Asimismo indicó que la misión del Banco responde al desarrollo, la calidad de vida de las personas y la conservación del medio ambiente, líneas de trabajo con las que el BID define sus estrategias en los países.
Ricardo Quiroga compartió el trabajo que realiza el BID en el sector agropecuario, área donde se desempeña, y que trabaja con temas de medio ambiente, agricultura y manejo de recursos naturales. Indicó que el Banco tiene otros departamentos que responden a temáticas de salud, energía, y transporte. “Es sectorializado y de alguna manera replica las estructuras ministeriales de los países y responde a proyectos de desarrollo en los diferentes sectores. Tenemos esa visión multisectorial”, apuntó.
Para entender como el BID define sus prioridades estratégicas en los sectores en los que interviene, Quiroga habló sobre el marco de políticas que se establecen en la reposición de capital. “El Banco cada cierto tiempo repone su capital. Está conformado por países prestatarios y no prestatarios y todos contribuyen con capital. Los países más importantes en términos de su contribución son Estados Unidos, Brasil, México y Argentina, pero también hay socios como Japón y países europeos, que son donantes de capital pero, que no forman parte del grupo prestatario. Este grupo lo integran 26 países latinoamericanos y del Caribe, los cuales acceden a recursos de financiamiento del Banco. Y funciona como una cooperativa, es decir, los directores y gobernadores de la entidad son los ministros de finanzas de los países y son los que se reúnen y definen las prioridades y la dirección que el Banco va a tomar en términos de estrategias”, explicó el funcionario.
Relató que en 2006-2007, cuando se hizo el último incremento de capital, los ministros de finanzas definieron las grandes prioridades del BID y los temas en los que iba a centrar su apoyo: reducción de pobreza y desigualdad, los desafíos que impone el cambio climático a nivel mundial y colaborar para que los países trabajen en una mayor integración regional.
Su conferencia continuó con las políticas, estrategias y marcos sectoriales con las que se maneja la Entidad. “Tienen un carácter obligatorio y tenemos que rendir cuenta del cumplimiento de ellas” precisó. Puso como ejemplo las políticas de salvaguardias ambientales, pueblos indígenas, de acceso a la información, que se tienen que cumplir y que cuando se realiza cualquier préstamo se tiene que verificar que no hayan violaciones.
Luego se refirió a las estrategias que se vinculan a temas más transversales como el cambio climático. Y por último a los marcos sectoriales, que son los más específicos y que sirven para mantener un diálogo con los países para analizar sus demandas. En esa línea se enfocó en el de Agricultura, área que define tres grandes desafíos respecto a la situación del sector en Latinoamerica y que se aplica a toda la región. Mencionó que a partir de un diagnóstico y evaluación se identificó que la productividad es muy baja o heterogénea y que hay brechas muy marcadas entre los países y al interior de los mismos. En el caso de Argentina dijo que la brecha tecnológica se da entre la economía pampeana y la que no lo es.
Otra de las conclusiones que mencionó tiene que ver con que los países con altas dotaciones de tierra reflejan un mejor desempeño. También destacó que la distribución desigual de beneficios es muy elevada en el sector rural de Latinoamérica. "Hay una gran cantidad de desigualdades respecto a la situación de los pequeños productores sobre todo en la Agricultura familiar respecto a algunos grupos más industrializados en el sector agroindustrial. Esto tiene grandes implicaciones sobre niveles de pobreza", sintetizó.
Por último resaltó que el desafío latente tiene que ver con la agricultura y el cambio climático. "Los impactos negativos sobre rendimientos son evidentes en algunas áreas. La disponibibilidad hídrica es un problema en muchos países, y la variabilidad y sequía, en otros. Esto es lo que el banco sectorial de Agricultura del BID identifica como uno de los grandes desafíos sobre los cuales tenemos que incidir”.
Previo a la conferencia la responsable de Relaciones Internacionales, Jimena Estrella Orrego, comentó que la disertación se enmarca en una iniciativa de la Secretaria que impulsa desde este año “una oficina de proyectos internacionales que apunta a la búsqueda sistemática de fondos internacionales para el apoyo de proyectos de investigación, vinculación y extensión”. Además mencionó que la oficina se articulará con el área de Vinculación de la secretaría de Desarrollo Institucional para satisfacer necesidades de docentes e investigadores en términos financieros y de recursos humanos para llevar adelante los proyectos de la Universidad.
Por su parte el vicerrector Jorge Barón reflexionó sobre las etapas de crecimiento de Mendoza y la Universidad, y sobre este punto destacó el avance en la vinculación con los sectores socio productivos y la importancia que adquiera una dimensión nacional y regional. En ese sentido resaltó que la iniciativa de trabajar con los organismos de crédito como el BID es el camino, y el interés de la UNCUYO es continuar con ese acercamiento e interactuar cada vez más con los distintos actores públicos y privados de Mendoza.
Por último manifestó la intención de poder articular acciones específicas que ayuden a mejorar la calidad de vida de la comunidad. "La Universidad tiene la vocación de aportar sus capacidades y conocimientos -enfatizó y agregó - es necesario interactuar con los sectores socioproductivos y con organismos de financiamiento, que viabilicen emprendimientos y propuestas".
El especialista
Ricardo Quiroga es doctor en Economía de Recursos Naturales de la Universidad de Connecticut y magíster en Economía de la Universidad de Delaware. También es economista de Recursos Naturales y Medio Ambiente en división de Medio Ambiente, Desarrollo Rural y Administración de Riesgos por Desastres (INE/RND).
Desde el 1993 lideró en el BID el diseño y ejecución de proyectos de inversión en temas de medio ambiente, manejo de recursos naturales y desarrollo rural en todos los países de América Latina y el Caribe. Asimismo, encabezó la formulación de estrategias, marcos de política y estudios sectoriales en estos temas.
Desde el 2011, trabaja desde las oficinas del BID en Argentina y entre sus responsabilidades tiene a su cargo la supervisión del préstamo de PROSAP.